La OMS autoriza realizar transfusiones como medio para combatir el ébola
Los expertos de la agencia de Naciones Unidas destacan las pruebas con dos vacunas cuyos resultados definitivos se conocerán en noviembre
MADRID. Actualizado: GuardarLa lucha contra el ébola podría contar con una nueva herramienta: la transfusión de sangre y plasma procedentes de personas que hayan superado la enfermedad. La Organización Mundial de la Salud (OMS) acordó ayer el inicio de este tratamiento experimental, que permitirá introducir anticuerpos desarrollados por las personas que se han curado en el organismo de los enfermos.
Tal como avanzó ayer la directora adjunta de la OMS, Mary Paule Kieny, este tratamiento se realizará a lo largo de los próximos dos meses. En caso de obtenerse resultados positivos, esta técnica sería aplicada de inmediato en todos los países afectados por la epidemia. Los primeros en acceder a este nuevo tratamiento serían los trabajadores sanitarios, tal como estableció el comité de ética de esta agencia de Naciones Unidas. Malí será el país donde se realizarán las pruebas con estas transfusiones y sueros, apuntó Mary Paule Kieny.
Durante la reunión en Ginebra, a la que asistieron 200 expertos de la OMS, se analizaron los resultados de las dos vacunas contra el ébola: la VSV-EBO desarrollada por el Laboratorio Nacional de Microbiología de Canadá, que anunció una donación a la OMS de hasta 1.000 dosis, y el ChAd-EBO, fabricado a partir del adenovirus de chimpancé. Estas serán inoculadas también entre los trabajadores sanitarios en los países afectados, por ser ellos los más expuestos a contagiarse con el virus. En todo caso, también habrá que esperar a noviembre para conocer los resultados de las pruebas con estos dos compuestos.
Respecto al ZMapp -el suero inmunológico experimental que contiene 3 anticuerpos monoclonales y que ya ha dado resultados positivos en varios enfermos- los expertos de la OMS recuerdan que «sigue sin haber un estudio completo sobre su seguridad»
Según los últimos datos facilitados por la OMS, el número de afectados por el virus del ébola era hasta ayer de 3.944, de los cuales 2.097 murieron. Por países, Liberia fallecieron 1.089 personas, Guinea 517 y Sierra Leona 491. Nigeria ha declarado 22 casos y ocho muertos.
Semanas decisivas
Mientras tanto, Naciones Unidas se fijó la meta de detener la extensión de la epidemia de ébola en un plazo de seis a nueve meses, según anunció el secretario general de la organización, Ban Ki-moon. Tras una reunión con altos funcionarios de salud en la sede de la ONU en Nueva York, Ban señaló que «las próximas semanas serán decisivas» en los esfuerzos internacionales dirigidos a combatir la peor epidemia mundial de ébola. «El objetivo es detener la transmisión de ébola en los países afectados, en el plazo de seis a nueve meses, y prevenir la propagación internacional del virus», dijo Ban.
La ONU está abocada a lograr la adhesión internacional para conseguir unos 463 millones de euros que se usarían para otorgarle suministros a África Occidental para enfrentar la epidemia. Ban Ki-moon anunció la creación de un centro de crisis del ébola para dirigir la coordinación de la estrategia internacional contra el virus, que ya deja unos 2.000 muertos en Guinea, Liberia y Sierra Leona. El líder de la ONU llamó a los países a unirse para un «aumento significativo de la ayuda» a África occidental mediante el envío de más médicos, enfermeras, camas, camiones, equipos y otros vehículos. Por su parte, la Unión Europea destinará un paquete de ayuda de 140 millones de euros para apoyar a Guinea Conakry, Sierra Leona, Liberia y Nigeria.
El secretario general de la ONU hizo las declaraciones tras reunirse con la directora de la OMS, Margaret Chan, y el coordinador de la ONU para el ébola, David Nabarro. Naciones Unidas amplió su campaña contra el ébola después de que el grupo médico internacional Médicos Sin Fronteras (MSF) declarara esta semana que el mundo está «perdiendo la batalla» para contener el ébola. Ban reconoció que el número de casos de ébola viene «creciendo exponencialmente» y advirtió de que «la enfermedad se está extendiendo mucho más rápido que la respuesta».