El Parlamento de Cataluña investigará la fortuna oculta de Pujol y su familia
Mas asegura que al caso no afecta a su Gobierno, pero la oposición teme que puede forzar un adelanto electoral para abortar la comisión
MADRID.Actualizado:La esperanza del Gobierno de Artur Mas de que la oposición no fuera capaz de unirse para pedir una investigación en el Parlament sobre la fortuna opaca de Jordi Pujol y su familia se vino abajo una vez que el PP anunció ayer que apoyará la petición en ese sentido de Esquerra, Iniciativa y la CUP. Todo el arco opositor de la Cámara, desde republicanos a populares, secundará la solicitud y la negativa de los 50 diputados de CiU será insuficiente para frenarla. Un escenario que ha alimentado la hipótesis de que Artur Mas ponga punto final a la legislatura, convoque elecciones anticipadas e impida que se constituya el comité. Una salida que desde el Palau de la Generalitat se descarta, por ahora.
Los populares tras 24 horas de dudas dieron el sí a la investigación parlamentaria de la fortuna en el extranjero de Pujol y su familia durante tres décadas. Su presidenta, Alicia Sánchez-Camacho, anunció que el próximo martes pedirá que se convoque este mismo mes un pleno extraordinario de la Cámara para que se apruebe la creación «lo antes posible» de la comisión. CiU, denunció la dirigente popular catalana, pretende que se atrase hasta octubre o noviembre. Es muy probable que la federación nacionalista consiga dejar para el próximo mes el debate y votación de la petición con recursos reglamentarios.
Los socialistas, por su parte, tienen la sospecha de que Mas va a aprovechar el 'caso Pujol' y el embrollo de la celebración de la consulta para convocar «unas elecciones no ya anticipadas, sino precipitadas», en palabras de su primer secretario, Miquel Iceta. La solución del adelanto de los comicios para evitar una investigación sobre los 23 años de gestión de la concesión de obra pública del Gobierno de Pujol está en el ambiente político catalán. Algo a lo que contribuye, y mucho, el creciente deterioro de sociedad entre CiU y Esquerra pese a los comentarios apaciguadores del portavoz de la Generalitat, Francesc Homs, quien apuntó que los avatares del 'caso Pujol' no figuran en el pacto de legislatura de los dos socios.
Artur Mas también intentó minimizar el impacto del caso y ante la Cámara de Comercio de Barcelona aseguró que el adelanto de los comicios no está sobre la mesa porque la confesión de su antecesor y mentor político no «afecta políticamente» al Gobierno de Cataluña ni a él mismo, aunque en el terreno personal se siente «triste». Palabras que fueron aplaudidas por los empresarios asistentes. El presidente catalán, no obstante, se mostró muy duro con la comisión de investigación una vez que Pujol ha aceptado acudir al Parlament a dar explicaciones sobre su conducta fiscal y la de su familia. «No es serio», dijo, porque el trámite lógico es escuchar lo que tenga que decidir y después decidir.
«Ladrón, chorizo»
El expresidente, mientras tanto, prefirió no opinar sobre el comité de investigación en las movidas y desorganizadas declaraciones a la prensa que se organizan cada día a la salida de su domicilio, al que ayer fue de visita su hijo Oriol, imputado en el 'caso de las ITV'. Aclaró, esta vez sí, que en cuanto haya un acuerdo sobre la fecha se desplazará hasta la Cámara autonómica a dar explicaciones de su dinero negro porque ahora «sí tengo más que decir» de lo que dijo en su escrito de confesión del 25 de julio. Con una música de fondo de abucheos e insultos -«ladrón, chorizo, delincuente, mafia, mangante»- de los transeúntes y con toques de claxon de los coches, Pujol recordó que no está obligado a acudir, pero irá por «el respeto al Parlament y la consideración que tengo a lo que representa para el país y la democracia». El reglamento de la Cámara solo establece la obligatoriedad de asistir a las citaciones de las comisiones de investigación.
Pese a las prisas de algunas fuerzas por constituir la comisión de investigación es improbable que se forme antes de que el expresidente explique en la comisión de asuntos institucionales sus actividades fiscales irregulares. Pujol pidió comparecer después del 22 de septiembre para no influir en las movilizaciones de la Diada del próximo jueves ni mediatizar la declaración de su hijo Jordi Pujol Ferrusola ante el juez Pablo Ruz el 15 de septiembre. Una demora que molestó a todos los grupos, incluido CiU, que hubiera preferido que acudiera de inmediato a la sede legislativa porque de esa forma se abría una puerta a desactivar la comisión de investigación. «Pero ha puesto a la familia por delante de todo», se lamentó ayer el portavoz Francesc Homs.