Miles de nigerianos huyen ante la rápida ofensiva territorial de los islamistas
Actualizado: GuardarDecenas de miles de personas han huido de sus casas ante el rápido avance de Boko Haram en el noreste de Nigeria. El éxodo se ha intensificado desde que el pasado 25 de agosto la banda declarara la creación de un califato islámico en las áreas bajo su control e iniciara una ofensiva de grandes proporciones en los Estados de Borno y Adamawa. El último ataque tuvo lugar ayer, durante la madrugada, contra Bama, provocando la partida de sus vecinos hacia Kawuri o la cercana Camerún. Los refugiados procedentes de esta ciudad, la segunda más poblada de la zona, aseguran que prosiguen los choques entre cientos de milicianos, pertrechados con rifles automáticos y lanzagranadas, y las fuerzas locales, que resisten con el apoyo de la aviación.
Numerosas familias y jóvenes que escapan de la leva forzosa de los yihadistas han buscado socorro en los campos para desplazados o solicitado asilo en los países colindantes. A lo largo de la última semana, los radicales se han hecho con tres distritos de Borno y uno en Yobe y ocupan importantes localidades como Gwoza, Dikwa y Madagali. Además, un destacamento formado por 1.200 soldados cameruneses permanece en la frontera ante el temor de que los radicales, tras tomar el centro aduanero de Gamboru-Ngala, intenten expandirse en el territorio vecino. Las tropas de Yaundé se han concentrado en Fotokol, donde también han hallado acogida 15.000 nigerianos expulsados de sus hogares.
Los asaltos indiscriminados, característicos de la organización, coinciden con una creciente persecución de las comunidades cristianos que incluye asesinatos.