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La subasta del Tesoro deja la deuda española a un paso de la rentabilidad negativa
Este tipo de interés atrae a grandes fondos o bancos que buscan seguridad y liquidez, mientras que perjudica al pequeño inversor
Actualizado: GuardarEspaña está a un paso de financiarse a corto plazo gratis. Es más, está muy cerca de hacerlo no a coste cero, sino con ganancias. Y es que la subasta del Tesoro celebrada ayer se quedó muy cerca de la rentabilidad negativa. En concreto, adjudicó 3.500 millones de euros en letras a tres y nueve meses a tipos prácticamente cero. Así, colocó 1.106,13 millones a títulos a tres meses con un interés marginal del 0,040%. Por su parte, adjudicó otros 2.394,68 millones en letras a 9 meses con tipos medios de 0,107% y un marginal del 0,115%. Los expertos dan casi por seguro que en próximas subastas del Tesoro a corto plazo los tipos negativos aparecerán. Una situación totalmente novedosa para España y que genera muchas dudas.
¿Qué son los intereses negativos? El Tesoro emite deuda periódicamente para cubrir las necesidades financieras del Estado. Normalmente lo hace a través de subastas a largo plazo (obligaciones a 10, 15 o 30 años), medio (bonos a 3 y 5 años) o corto plazo (letras a tres, seis, nueve y doce meses). En función del volumen de la demanda, el riesgo de la inversión, etc..., el mercado exige más o menos intereses. Las letras a corto plazo tienen los tipos más bajos debido a que son operaciones de menor riesgo, es decir, es más fácil para el inversor recuperar el dinero. Pero en las últimas subastas se ha llegado a un mínimo histórico tan bajo que los intereses exigidos son casi cero y pueden llegar a ser negativos. Esto significa que el inversor pagaría -aunque fuese un porcentaje muy pequeño- por adquirir esa deuda. Es decir, que recuperaría menos dinero del que invirtió.
¿Por qué se produce? Los expertos coinciden en señalar que la política monetaria llevada a cabo por el BCE es en gran parte responsable de esta situación. «Con una inflación tan baja y unos tipos de interés del euro tan reducidos no es descartable que la subasta acabe registrando tipos negativos», explica Felipe López-Gálvez, analista de Self Bank. Pero no es el único motivo. A esta situación hay que sumar las turbulencias geopolíticas también señaladas por el propio presidente del BCE, Mario Draghi. Estas incertidumbres hacen que los inversores recurran a valores seguros como la renta fija frente a la variable como la Bolsa. «La renta fija es más segura que la variable y es normal que los inversores se alejen del riesgo en estos momentos», asegura López-Gálvez.
¿Afecta a todos los inversores? No. El Gobierno aprobó el pasado viernes una resolución por medio del a Secretaría General del Tesoro por la que modificó el procedimiento de adjudicación de las letras para evitar que el pequeño inversor se viera perjudicado por una rentabilidad negativa. En concreto, estableció que las peticiones no competitivas -aquellas en las que el inversor muestra la cantidad que quiere adquirir pero no la cantidad de rentabilidad mínima- se darían por no presentadas en caso de que el tipo medio de la subasta fuera negativo. «Es una medida para proteger a los pequeños inversores que no tienen una gran cultura financiera y suelen utilizar este tipo de mecanismos de participación», asegura Juan Luis García Alejo, director de análisis y gestión de Inversis. Sin embargo, sí que afecta a los inversores que adquieren deuda mediante peticiones competitivas (que fijan una rentabilidad mínima). «Quien fija un precio sabe a lo que juega. Busca seguridad y liquidez», explica Alejo.
¿A quién beneficia? Sin duda, el principal beneficiado de una rentabilidad negativa es el propio Estado al lograr financiarse sin coste alguno. Sin embargo, también hay inversores a los que los tipos negativos no les disuade. «Hay gente que sigue necesitando activos muy líquidos en su cartera y no le importa la rentabilidad negativa y se la pueden permitir. Son inversores institucionales como fondos de inversión o bancos», recuerda García Alejo. De hecho, las entidades financieras pueden ver una oportunidad en estas letras ya que de todas formas los intereses son más favorables que la tasa negativa del 0,1% impuesta a los depósitos en el BCE.
¿Hay países con tipos negativos? Aunque España nunca se ha enfrentado a una situación así, lo cierto es que los intereses negativos son relativamente frecuentes en países como Alemania o Austria. Y no solo en letras a unos meses.