Washington rompe el cerco a los yazidíes
La minoría religiosa rodeada en el norte de Irak por los insurgentes empieza a huir
WASHINGTON.Actualizado:La alarma desatada por la situación de los desplazados yazidíes acosados por el Estado Islámico en el norte de Irak, que desplegó la unánime colaboración internacional con el Gobierno de Bagdad y llevó incluso a pensar en una operación de rescate, parece haberse desactivado en un día, según confirmó ayer Barack Obama. El presidente de Estados Unidos anunció en una breve comparecencia ante la prensa que no será necesaria una misión para rescatar a los civiles, pero seguirán los bombardeos selectivos contra posiciones yihadistas para proteger a personal e instalaciones estadounidenses en ese país.
«Hemos roto el sitio del Estado Islámico (EI) al monte Sinjar», dijo Obama, quien además adelantó que parte de los militares estadounidenses enviados a Irak volverán a EE UU en los próximos días. «No esperamos que vaya a haber una operación adicional para evacuar a la gente de la montaña y es poco probable que vaya a ser necesario que continúen las entregas aéreas de ayuda humanitaria en el monte», señaló el presidente.
Obama subrayó que la situación sigue siendo «grave» para «los iraquíes sujetos al terror del EI en todo el país», por lo que Estados Unidos seguirá trabajando con sus socios internacionales «para proporcionar ayuda humanitaria a aquellos que están sufriendo en el norte de Irak».
El Pentágono adelantó ayer que un equipo de militares estadounidenses se había desplazado durante 24 horas al monte Sinjar y había constatado que muchos desplazados habían podido escapar gracias «a los bombardeos selectivos de Estados Unidos, a la ayuda humanitaria y a los esfuerzos de los soldados kurdos».
Mientras tanto, los civiles que quedan siguen abandonando la montaña con la ayuda de las tropas kurdas y de civiles yazidíes que están facilitando la huida a sus propias familias. De hecho, la agencia de la ONU para los refugiados registró ayer la llegada de 15.000 yazidíes al campamento de Newroz, en Siria, mientras otros grupos consiguieron llegar a centros de acogida en el Kurdistán.
El presidente de EE UU instó a todos los iraquíes a «unirse para derrotar a EI» a través de un nuevo Gobierno encabezado por el chií Haidar al-Abadi, designado como primer ministro el lunes. «(Al Abadi) todavía tiene una tarea difícil por delante con la formación de Gobierno, pero estamos moderadamente esperanzados de que la situación de Gobierno en Irak se está moviendo en la dirección correcta», señaló Obama.
Los ministros de Exteriores de la Unión Europea (UE) decidirán hoy si respaldan el envío de armas, en un Consejo extraordinario en el que también estudiarán cómo coordinar mejor sus esfuerzos de protección y apoyo a la población civil, así como la formación de un grupo de apoyo a Irak que incluya a países de la región como Arabia Saudí, Jordania, Líbano, Turquía, Egipto e Irán.
Algunos países de la UE como Alemania manifestaron en un primer momento su reticencia a enviar armas letales a Irak, pero ahora parece que el consenso entre los Veintiocho crece y que incluso Berlín podría estar a favor de la medida, que ya ha puesto en marcha Francia. Países Bajos y República Checa también estudian esta opción, mientras que Reino Unido ha ofrecido capacidades aéreas para transportar las armas de terceros países. España todavía no se ha posicionado en el debate.