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ESPAÑA

El presidente aplaza cualquier responsabilidad sobre 'Gürtel' o Bárcenas a las sentencias

Habla de la corrupción como una suma de errores pasados y de todos y dice que ahora solo importa tomar medidas para evitarla

A. T.
MADRID.Actualizado:

Mariano Rajoy respondió ayer a las preguntas que le hicieron sobre los casos 'Gürtel' y Bárcenas, que investigan importantes episodios de presunta financiación irregular en el PP, como si el asunto no fuese con él ni con el partido que preside desde 2004.

Sin pronunciar un solo nombre se limitó a valorar la corrupción como un fenómeno pasado, que afecta a todos y que está en manos de los tribunales, y a destacar que lo realmente importante en este momento es tomar la medidas necesarias, como el paquete que el Gobierno trata de pactar con la oposición, para que el fenómeno no se repita en el futuro.

«Que se produzca este tipo de acontecimientos no le gusta a nadie, pero las cosas son así». Con esta palabras dio por solucionada una pregunta que le decía cómo valoraba que la Audiencia Nacional estuviese a punto de sentar en el banquillo por corrupción a los tres últimos tesoreros del PP, que el juez instructor y la Policía consideren probado que su partido se financió en negro durante años, o que el expresidente balear Jaume Matas esté en la cárcel y el relevante dirigente castellonés Carlos Fabra esté a punto de entrar en prisión.

El presidente del Gobierno dio a entender que sus responsabilidades políticas y las de su partido ya estaban salvadas por el momento por el hecho de «muchas de las personas a las que ha hecho referencia ya no están en la vida política», «ni en el partido», añadió después. Cualquier otra futura responsabilidad solo estará dispuesto a discutirla a la vista de lo que digan las sentencias de estos y otros casos. «Los tribunales son los que tienen que decidir y los demás acatar lo que digan los tribunales, y yo lo haré, me guste o no me guste», afirmó.

La rueda de prensa se produjo justo un año después de que Rajoy compareciese en el Senado por Luis Barcenas. Ese día pidió perdón porque dijo que el extesorero le había engañado, pero también aseguró que en el PP nunca hubo contabilidad B.