Un canto a la unidad con pellizcos de monja
Sánchez promete incluir a sus rivales en la próxima ejecutiva y Madina dice que coserá el partido
MADRID. Actualizado: Guardar«Gana el PSOE». Ese es el mensaje optimista que repetían en la calle Ferraz los equipos de los candidatos a la secretaría general del partido tras su debate. Fraternidad y camaradería. Buen rollo. Pero durante las casi dos horas que duró el rifirrafe volaron algunos puñales de atril a atril entre Pedro Sánchez y Eduardo Madina. Por ejemplo, a cuenta de quién representa o defiende mejor a los militantes.
El dirigente vasco, que ha conseguido unir en su contra a una docena de aparatos territoriales a cuenta de su órdago para que este congreso fuera de voto directo y no por delegados -lo que terminó de frustrar que la andaluza Susana Díaz diera el salto, como pretendían-, utilizó esa baza desde el primer momento. «Puse mi cara porque vosotros votarais», dijo a las bases como ejemplo de lo que pretende.
Sánchez trató de presentarse como un militante más, libre de polvo y paja. Y puso sobre la mesa que hace un año y medio no estaba en política, lo que no contó fue que hace dos y medio sí, en el equipo de José Blanco. Lo cierto es que hasta hace un mes remaba casi en solitario. Pero ahora debe sacudirse el sambenito de aspirante teledirigido. «La democracia es patrimonio de todos y todas -replicó molesto a Madina-. Un militante, un voto no solo se produce como consecuencia de petición de un compañero, es un gran éxito de todos».
No fue sólo una cuestión de frases. Ni Madina ni Sánchez se miraron apenas y se mostraron rígidos con cada intervención del contrario. Un morro torcido aquí. Un suspiro allá. Nada que ver con su actidud hacia Tapias, al que escucharon sonrientes. Pese a todo, coincidieron en que de este congreso han de salir unidos. El madrileño prometió integrar a sus rivales en su ejecutiva. Madina no dijo lo mismo, aunque sí incluiría a Tapias. Su promesa fue otra: «Voy a trabajar para que la dirección integre a lo mejor que tiene este partido; quiero grandes referentes que se sepan bien sus temas».