Ultras judíos lincharon al palestino

La Policía israelí detuvo ayer por la mañana a seis hombres en relación con el secuestro y asesinato el miércoles del palestino de 16 años Mohamed Abu Kudar. Los arrestados, entre los que figuran menores de edad, están vinculados a conocidos grupos extremistas judíos y horas después confesaron su participación en el linchamiento del joven en Jerusalén Este. El grupo admitió que cometió el crimen en venganza por el secuestro y asesinato de Gilad Shaer, Naftalí Frenkel y Eyal Yifran, los tres estudiantes israelíes capturados y tiroteados en Hebrón por un comando islamista al que todavía no han logrado dar caza las autoridades hebreas.

Los detenidos proceden de Jerusalén, de la ciudad vecina de Beit Shemesh y de Adam, una colonia cercana en la Cisjordania ocupada, según reveló el portal ynetnews.com. Distintas fuentes los vinculan con grupos ultras como La Familia y Lehava y sus postulados racistas, antiárabes y contrarios a la convivencia pacífica entre israelíes y palestinos. La clave para dar con los autores de una atrocidad que ha sacudido a una sociedad israelí ya inmersa en el dolor por la pérdida de sus tres jóvenes estudiantes, además de redoblar las protestas desde el lado palestino, fue el coche empleado en el crimen.

Cámaras de seguridad del barrio de Shuafat, donde reside la familia de Mohamed, captaron el momento de su secuestro, y testigos llegaron a aportar la matrícula del vehículo a la Policía israelí. Según pudo confirmarse ayer, el grupo ultra -«nacionalista» en palabras de las autoridades hebreas- ya había sembrado el pánico en la zona el martes.

La tensión en Jerusalén Este, y en una barriada como Shuafat, de mayoría árabe, era extrema después de la localización, un día antes, de los cadáveres de los tres estudiantes judíos, a los que se buscaba desde su desaparición el 12 de junio. El día 1, los extremistas ahora detenidos detuvieron el coche frente a una mujer palestina y trataron de llevarse a su hijo de 9 años, Musa Zalum, en el barrio cercano de Beit Hanina. La mujer se enfrentó a los secuestradores y el menor aprovechó el momento para escapar. Imágenes difundidas en portales palestinos de Internet muestran al pequeño con magulladuras en el cuello.

Cinco de los seis arrestados, acusados de pertenencia a organización terrorista, asesinato de un menor, conspiración criminal, posesión de armas y municiones y actuación criminal por motivaciones racistas, permanecerán durante ocho días en prisión preventiva, a pesar de que los investigadores reclamaron dos semanas. El sexto acusado seguirá bajo custodia durante cinco días.

El primer ministro israelí, que ayer visitó a las familias de los tres estudiantes asesinados en Hebrón, condenó el crimen de Mohamed porque, subrayó, la censura de esta atrocidad «es lo que nos diferencia de nuestros vecinos». «No hay sitio para esta clase de asesinos en nuestra sociedad», declaró Benjamín Netanyahu, que insistió en su llamamiento de estos días a la «responsabilidad» de todas las partes para rebajar la tensión.

A este propósito ayuda la liberación de Tariq Abu Kudar, ciudadano estadounidense, primo del asesinado Mohamed y brutalmente golpeado por la Policía el viernes después de participar en protestas en Jerusalén Este. Aunque al joven, que muestra en el rostro las pruebas de la extralimitación de los agentes, le aguardan ahora 9 días de arresto domiciliario que ponen en peligro su regreso a Florida, previsto para el día 16. Pero la violencia no cesa, como prueba el atropello mortal de dos trabajadores palestinos en Haifa, del que algunas fuentes responsabilizaron anoche a un colono.