Los rebeldes prorrusos preparan la batalla final
MOSCÚ.Actualizado:Las milicias separatistas prorrusas, desalojadas el sábado de Slaviansk, su principal bastión durante los últimos tres meses, seguían llegando ayer a la ciudad de Donetsk, el centro administrativo de Donbass, en donde se disponen a organizar la resistencia y a dar la última batalla a las tropas ucranianas. En este contexto y pese a la enorme presión militar ejercida por Kiev, los rebeldes no parecen proclives a aceptar las condiciones para un alto el fuego. El Ejército ucraniano está avanzando rápidamente al sur, hacia Donetsk, gracias a que los insurgentes huyen en estampida después de que el viernes quedaran completamente cercados y tuvieran que romper ese cordón en las proximidades de Kramatorsk para evitar quedar atrapados en la ratonera de Slaviansk.
Las fuerzas enviadas por Kiev controlan ya Slaviansk, la vecina Kramatorsk y ayer entraron en Druzhkovka, Artiómovsk y Konstantínovka, localidades situadas en el camino hacia Donetsk, a cuyas puertas se encuentra Górlovka. Allí les esperan los hombres del comandante en jefe de los sublevados, Ígor Strelkov, un oficial del servicio de inteligencia militar ruso. Según las agencias ucranianas, el propio Strelkov se trasladó ayer a Donetsk para «organizar la defensa» de esta próspera urbe de un millón de habitantes.
La capital de Donbass se prepara para un posible asedio mientras los que pueden ya han empezado a escapar de la zona. Aunque dentro de la ciudad de Donetsk no hay tropas ucranianas, ayer se produjo un tiroteo entre los separatistas y los guardas de seguridad de la delegación de la Dirección Penitenciaria.