Una madre española mata de una puñalada a una maestra en Francia

Una ciudadana española de origen marroquí, con las facultades mentales trastornadas, mató ayer de una puñalada en el costado a una maestra de párvulos delante de sus 14 alumnos en una escuela de Albi (sur de Francia) utilizando un cuchillo de 16 centímetros. La homicida, de 47 años y madre de dos hijos, fue detenida minutos después del crimen y hospitalizada de oficio en un servicio psiquiátrico por prescripción médica ante la incoherencia de sus declaraciones. La asesina había estado ingresada en psiquiatría hasta el 18 de marzo. Tras recibir el alta recuperó a su hija pequeña, de 6 años, a su cargo, que estaba en España y matriculó en la escuela de Albi.

Los hechos se produjeron a las nueve de la mañana, hora de entrada a clase del último día del curso académico, en la escuela pública Edouard Herriot, centro que acoge a 284 niños de preescolar y primaria. La agresora, de 47 años, sacó un cuchillo y asestó una puñalada en el costado a la maestra Fabienne Terral-Calmès, de 34 y madre de dos hijos de corta edad, que se desplomó en el aula herida mortalmente en un charco de sangre. Los alumnos y el personal docente fueron evacuados para recibir asistencia psicológica.

Según testigos, la profesora hizo una observación a la mujer poco antes del drama relativa a los numerosos retrasos de su hija, de 6 años, una de sus alumnas desde hacía mes y medio. «No soy una ladrona», la oyeron gritar antes de la agresión. Luego justificó su acto en razón de que «la maestra había sido mala con mi hija».

«Un acto aislado»

La detenida era conocida de los servicios sociales desde hacía un par de años por ser una madre aislada y por un problema de ausencia de escolarización de su hija. También estaba fichada por la Policía local por abandono de menor de edad y no denuncia de su desaparición. Además, tiene antecedentes de hospitalización en servicios de psiquiatría.

«Es un acto odioso, el homicidio de una enseñante en su clase delante de sus alumnos, por una mujer que según los primeros elementos de la investigación parece padecer trastornos psiquiátricos importantes», declaró el ministro de Educación, Benoît Hamon, que se desplazó al lugar de la tragedia. «Es un acto aislado pero espantoso y abominable que nos hace trabajar para proteger mejor la escuela de la violencia», añadió.

El homicidio, condenado por el presidente François Hollande y el primer ministro Manuel Valls, es un hecho excepcional en Francia. Pero enlaza con el incremento de las agresiones y las violencias en el sector educativo.