DAR EJEMPLO
Actualizado: GuardarLa vida está llena de gurús, predicadores, personas con la inusitada capacidad de dar los mejores consejos, de emitir juicios de valor de todo lo que ocurre y de presumir de un nivel moral tan alto como el porcentaje de ocasiones que se pasan su milagroso manual por el arco del triunfo.
Porque ganar no es sinónimo de triunfar. Puedes alcanzar la victoria a través de muchos caminos pero muy pocos (y en ocasiones diferentes) te conducen al triunfo. En el fútbol, como en la vida, tenemos casos prácticos que así lo pueden atestiguar. El último es el del futbolista uruguayo Luis Suárez. Bota de Oro de la temporada 2013-2014, con el dinero por castigo a sus 27 años, los clubes más poderosos del mundo se lo rifan para tenerle en sus plantillas. Pero 'el deseado' que asegura triunfos con sus goles decide a menudo complicar el triunfo con una conducta inadmisible, ni siquiera en las tan manidas leyes no escritas del fútbol .
Nada, absolutamente nada, justifica que un futbolista se disfrace de hombre lobo cada cierto tiempo para morder a sus adversarios en un ataque de locura pasajera motivado por la luna llena o simplemente por un cruce de cables más propio de un pandillero de tres al cuarto.
Muchos se han llevado las manos a la cabeza ante la dura sanción que la FIFA ha impuesto a Suárez tras su acción antideportiva ante Chiellini, paradójicamente el primero en 'defender' a su entonces rival.y siempre compañero. No me extraña conociendo los intereses que se mueven en el fútbol y el corporativismo existente, aunque hay ocasiones en las que una defensa injustificada puede producir el efecto opuesto.
Las bondades del manual de Suárez no contemplaban agachar la cabeza, sentir vergüenza y pedir perdón. Su puntito de altivez, su soberbia y arrogancia cuando se vio señalado le condenaron ante un estamento empeñado en representar unos valores que quizás ellos mismos tampoco sean valedores de abanderar. Ni engañes, ni estafes, ni simules, ni agredas, ni insultes. O por lo menos que no se note. Y entonces, dientes, dientes. Para comer.pero no para morder.