La secretaria iberoamericana confía en que Felipe VI renueve la fuerza de las cumbres

La llegada al trono de España de Felipe VI supone una oportunidad para renovar la fuerza de las cumbres iberoamericanas. Es la opinión de la secretaria general de esta organización, la costarricense Rebeca Grynspan, quien ayer destacó el conocimiento que posee el Rey del continente latinoamericano y su compromiso personal por mantener los vínculos que unen a los países de uno y otro lado del Atlántico. Don Felipe asistirá en diciembre en la ciudad mexicana de Veracruz a su primera cumbre como jefe de Estado. Se enfrentará al reto de mantener el protagonismo que desempeñó don Juan Carlos en estas citas interoceánicas. El anterior Monarca fue uno de los principales impulsores de estos encuentros.

Al dar por seguro Grysnpan que Felipe VI «será un actor de importancia en la renovación del sistema de cumbres», la secretaria general iberoamericana reconoció la necesidad de revisar la organización de unas citas que se han celebrado de forma ininterrumpida con carácter anual desde 1991. En la pasada cumbre de Panamá ya se aprobó que las reuniones se celebren a partir de ahora cada dos años con el fin de no saturar la agenda de los mandatarios iberoamericanos, más involucrados a día de hoy en los procesos de integración regionales como la Alianza del Pacífico o Mercosur.