Pugna política por Navantia
PP y PSOE libran una dura batalla mediática por arrogarse la autoría de los contratos que vuelven a poner en órbita a los astilleros. El mérito, por ahora, es del Gobierno de la nación
Actualizado: GuardarUna foto vale más que mil palabras y eso es lo que debe pensar el PP a la hora de exportar los acuerdos alcanzados por el Gobierno de la nación en favor de Navantia. Sin embargo, los dirigentes populares de Cádiz no contaban que en esta carrera por arrogarse la autoría de estos contratos le saldría una dura competidora mediática: la presidenta de la Junta, la socialista Susana Díaz. El PP cometió un error de bulto al retratarse en la Diputación de Cádiz con el presidente de la SEPI, Ramón Aguire, el mismo día que se anunciaba la contratación del BAM para el astillero de San Fernando y se avanzaba en las negociaciones del quinto gasero para Puerto Real. El sitio de la reunión era el adecuado, sin embargo, la foto de familia no era la idónea. El presidente de la SEPI se rodeó del subdelegado del Gobierno, Javier de Torre, del presidente provincial del PP, Antonio Sanz, de la alcaldesa de Cádiz, Teófila Martínez, y del presiente de la Diputación y alcalde deLa Isla, José Loaiza. Se echó en falta en esa imagen la presencia de la regidora de Puerto Real, la andalucista Maribel Peinado. La presidenta de la Junta, Susana Díaz, les devolvió la pelota y lo hizo con una carga de protagonismo importante. Díaz aprovechó la visita del presidente de Iberdola a Sevilla para anunciar un nuevo contrato para Navantia. Se trataba de la construcción en Puerto Real de las estructuras metálicas para un parque eólico-marino que lidera Iberdrola en Alemania. Además, ha abierto una línea de ayuda de 3 milloners de euros para Navantia si finalmente el Gobierrno de la nación cumple con sus compromisos. El remate ha sido la intercesión de Díaz con Canadá en favor de un contrato y la vista ayer a los astilleros de la Bahía. Son acciones que han dejado en fuera de juego al PP por su carga mediática, pero hay que recordar que el mérito de la mejora de Navantia, pro ahora, corresponde al Gobierno central.