Fotos de una matanza que atizan el odio en Irak
La contraofensiva chií contiene al EIIL, que difunde imágenes de la ejecución de 1.700 personas después de la conquista de Mosul
Actualizado:La segunda guerra sectaria de Irak ya tiene su primera masacre. Cientos de jóvenes vestidos de civiles, muchos con camisetas de equipos de fútbol como el Manchester United o el Barcelona, caminan escoltados por encapuchados. El destino es una fosa poco profunda en la que van amontonándose para ser ajusticiados a balazos de kaláshnikov. El órgano de propaganda del Estado Islámico de Irak y Levante (EIIL) no ha tardado en difundir las imágenes de su primera gran matanza, en la que asegura haber acabado con 1.700 soldados del Ejército de Irak tras la toma el miércoles de Tikrit, ciudad natal de Sadam Hussein. Las fotos comenzaron a difundirse en las redes el sábado por la noche y ayer el portavoz del Ejército, general Qassim al-Musaui, confirmó su autenticidad.
Desde que el EIIL lanzó su doble ofensiva contra Mosul y Tikrit a comienzos de la semana pasada, las autoridades iraquíes censuraron las redes sociales para evitar la difusión de unas imágenes que ayudan a disparar el odio sectario en un momento de máxima tensión. Pero la maquinaria propagandística del EILL -clave para seguir reclutando a combatientes en todo el mundo y obtener donaciones- es imparable.
El grupo difundió las ejecuciones para mostrar que «éste es el sino de los chiíes enviados por Nuri a combatir a los suníes», en referencia al primer ministro interino, Nuri al-Maliki. El segundo objetivo de la carnicería habría sido vengar la muerte de Abdul-Rahman al-Beilaui, comandante del EIIL caído en la reciente ofensiva y cuya muerte confirmaron los insurgentes.
Las cifras de personas ejecutadas o de yihadistas caídos -éstos fueron 297 en las últimas 24 horas, según el Ministerio de Defensa- son imposibles de verificar de forma independiente en un campo de batalla dividido sectaria y étnicamente, como ya ocurrió entre 2006 y 2008. Los kurdos tienen a sus Peshmerga (combatientes), que aprovecharon el caos en el norte para hacerse con Kirkuk, ciudad en disputa entre la región autónoma kurda y Bagdad desde 2003.
Los chiíes están respondiendo en masa al llamamiento a tomar las armas del Gran Ayatolá Alí Sistani. El éxito de la convocatoria del religioso ha obligado al Gobierno a crear la bautizada como Dirección para la Movilización Popular, para organizar a los miles de jóvenes del centro y sur del país que acuden para ayudar a las fuerzas de seguridad en su lucha contra la insurgencia suní.
Marcha atrás de Sistani
El llamamiento de Sistani -leído en la oración del viernes por uno de sus ayudantes- sorprendió después de la moderación de la que siempre ha hecho gala el clérigo octogenario radicado en Nayaf. 48 horas después, un comunicado en su web oficial pedía «el máximo grado de contención», especialmente a los ciudadanos que viven «en zonas mixtas» (suníes y chiíes). Un mensaje de complicado cumplimiento tras la difusión de las imágenes de las fosas comunes en Tikrit y las amenazas constantes de los radicales suníes de conquistar los lugares santos de la secta rival.
Después de una ofensiva relámpago que le llevó a hacerse con Mosul y Tikrit en 48 horas, el EIIL parece haber frenado el ritmo. Anunció su intención de avanzar hacia Bagdad, pero en las últimas horas los combates más duros se registraron en Tal Afar, a 60 kilómetros de Mosul en dirección a la frontera siria. Tras la sorpresa y desbandada inicial, las fuerzas de Bagdad han «recuperado la iniciativa», según el portavoz del primer ministro en temas de seguridad, el teniente general Qasem Atta.
Al otro lado de la frontera el Gobierno de Damasco cumplió la promesa de apoyar a Bagdad y su aviación bombardeó bases del EIIL en las provincias de Raqqa (norte) y Hasake (noroeste), confirmó el Observatorio Sirio de Derechos Humanos. Estas operaciones de castigo directo contra el EIIL no han sido habituales en los últimos meses, en los que el Ejército de El-Asad parecía haber dado por perdidas provincias como Raqqa, cuya capital es la única del país sin presencia gubernamental.
Irak se prepara para una guerra sectaria aún más cruel que la de 2006 y 2008. Del lado suní tiene al EIIL, una versión más radical que Al-Qaida como acreditan sus métodos en el frente sirio-iraquí. En el bando chií, milicias como Asaeb Ahel Haq, una escisión del 'Ejército del Mahdi', o la organización Badr, con milicianos muy bien entrenados para una ocasión que los chiíes esperaban después de años marcados por constantes atentados contra su comunidad; el último ayer, con un coche bomba que mató a diez personas en un mercado de la capital.