Don Juan Carlos y don Felipe de Borbón en el desfile militar de la Fiesta Nacional de 2011. :: JUANJO MARTÍN
ESPAÑA

Los Reyes, en capilla

El futuro Felipe VI ya trabaja en la confección de su equipo, incluido el nuevo jefe de la Casa del Rey que sustituirá a Rafael SpottornoEmpieza la cuenta atrás hasta la abdicación del miércoles y la proclamación del jueves

MADRID. Actualizado: Guardar
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Los Reyes ya están en capilla. Don Juan Carlos y don Felipe de Borbón preparan con sus más estrechos colaboradores una semana que será crucial para el futuro de España. El primero dejará de ser rey el miércoles, cuando firme la abdicación en su hijo durante una solemne ceremonia en el Palacio Real. El segundo será proclamado por las Cortes Generales Rey de España el jueves en el Congreso, un acto al que acudirán las principales autoridades del país, entre ellos los 17 presidentes de comunidades autónomas, pero ningún gobernante extranjero ni representante de casa real alguna.

El todavía rey no tiene actividades oficiales programadas hasta la firma de su renuncia a la Corona. Don Felipe de Borbón también tiene su agenda casi vacía. Solo asistirá el miércoles por la mañana, en el que será su último acto como Príncipe de Asturias, a una reunión del Patronato del Real Instituto Elcano de Estudios Internacionales y Estratégicos, el 'think tank' más importante de España. El resto del dietario está en blanco.

Don Juan Carlos rubricará el fin a sus 39 años de reinado en el Palacio Real, un acto en el que no está prevista la presencia de don Felipe, que se convertirá en rey en cuanto su padre firme la abdicación. La Zarzuela explicó que el protagonismo de ese acto corresponde al Monarca, del mismo modo que en la ceremonia de proclamación el centro de los focos será Felipe VI, razón por la que su padre no estará en el palacio de la madrileña carrera de San Jerónimo. Su madre, la reina Sofía, en cambio estará presente, así como su hermana la infanta Elena, pero no en el escenario principal. La infanta Cristina, separada de la agenda oficial desde el estallido del 'caso Nóos' en el que su marido, Iñaki Urdangarin, está imputado por varios delitos.

La ceremonia de sanción de la ley de abdicación, que será aprobada de forma definitiva por el Senado el próximo martes después de que lo hiciera el Congreso el jueves, consistirá en la firma de la renuncia en presencia del presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, el ministro de Justicia, Alberto Ruiz-Gallardón, en su condición de notario mayor del Reino; los presidentes del Congreso, el Senado, el Tribunal Supremo y el Tribunal Constitución entre otras altas autoridades. Es posible que asistan también los expresidentes del Gobierno Felipe González, José María Aznar y José Luis Rodríguez Zapatero. Será, de todos modos, un acto restringido a 150 invitados, según informó la Zarzuela.

La proclamación del día siguiente será, en cambio, un acto multitudinario. No solo por los 3.000 invitados a la recepción que se celebrará en el Palacio Real tras la entronización en el Congreso, sino porque el trayecto desde la carrera de San Jerónimo hasta la residencia oficial de los Reyes lo harán don Felipe y doña Letizia en coche por las calles de Madrid, una ciudad que se prepara para celebrar el inicio del reinado de Felipe VI. La ciudad ya mostró ayer numerosos edificios engalanados con banderas de España, y a partir de mañana la patronal madrileña repartirá 10.000 más con la frase 'Todos con nuestro Rey'.

Fotos y bando municipal

La organización de empresarios de Madrid repartirá asimismo por los establecimientos comerciales de capital y de la comunidad 50.000 fotografías de don Felipe y doña Letizia para que las coloquen en los escaparates. Hasta la alcaldesa de la capital, Ana Botella, ha anunciado que emitirá un bando para animar a los madrileños a salir a las calles para vitorear a los Reyes y a que acudan a la plaza de Oriente, a la que se asomarán desde un balcón del Palacio Real.

El futuro Felipe VI, entretanto, prepara con su equipo, encabezado por el jefe de su Secretaría, Jaime Alfonsín, el discurso de proclamación. Una intervención que la Casa del Rey anticipó que será trascendental porque establecerá los ejes de actuación de su reinado. El próximo Monarca también trabaja en la elaboración del organigrama de la que será su Casa, cuya jefatura recaerá, con toda probabilidad, en Alfonsín que relevará a Rafael Spottorno, un diplomático que está al frente de la Zarzuela desde 2011, cuando sucedió a Alberto Aza.

Alfonsín es un abogado del Estado que trabaja con don Felipe desde 1995 y es un hombre de su máxima confianza. Otro de los cambios que estudia el futuro Felipe VI es el director de Comunicación de la Casa del Rey, cargo que desempeña ahora Javier Ayuso, pero que abandonará la Zarzuela junto a Spottorno. La designación del responsable informativo no es un asunto menor en un momento en que la Monarquía tiene como una de sus prioridades centrales la recuperación de la imagen de la institución, muy dañada desde el percance africano de caza del Rey en Botsuana y por el 'caso Nóos'.