UN VERANO MUY LARGO

Hoy empieza el Mundial. Felicidades a quien lo sepa disfrutar de principio a fin porque tendrá un mes de lo más provechoso en comentarios, debates, ilusiones, decepciones y chascarrillos, que es de lo que se trata. Luego estarán los pesados esos que sólo disfrutan de 'su' Cádiz y que pasan del fútbol mundial. Pues a ellos, por no saber disfrutar de todos los placeres que nos concede el deporte rey, les quedará un verano por delante muy largo, muy muy largo, demasiado largo, tedioso, horrible. Y como a ellos, a nosotros, los periodistas, que contamos los días que quedan para que llegue la dichosa junta de accionistas del Cádiz, fechada para el próximo 21 de julio, o 22. ¿Qué más dará ya un día más o un día menos si por entonces ya estaremos inmunizados al sopor?

Y no se equivoquen. El aburrimiento, mezclado con la rabia y la ira nacida de la eliminación en primera instancia ante el L'Hospitalet, comenzó hace ya dos semanas. Dos semanas que para rellenar las páginas de los períódicos, los minutos de la radio y de las televisiones los que vivimos de esto llevamos sudando sangre, sudor y lágrimas en busca de reportajes, entrevistas o noticias que puedan resultar interesante para el lector, oyente o televidente.

Por todo ello, y aún a la espera de lo peor que debe estar por llegar, rindo desde aquí mi más sinceras felicitaciones a todos los periodistas que se parten la cabeza en la búsqueda de algún tema que pueda resultar interesante para un cadista tan desilusionado al que en estos momentos, con toda su razón, no le puede interesar nada de nada hasta que no llegue, al menos, la primera jornada de la próxima temporada y tenga que hacer el cuerpo, por quinto año consecutivo, a la maldita División B. Eso sí, pese a todo este esfuerzo, siempre hay lectores que se quejan de esta o aquella noticia. Para esos, también mis felicitaciones.