![](/cadiz/prensa/noticias/201406/10/fotos/9002161.jpg)
El Gobierno hace suya la caída de la prima que ve como «confianza en vena»
España paga ya por su bono a 10 años menos que EE UU mientras instituciones públicas y privadas animan a emitir deuda dentro del país
MADRID. Actualizado: Guardar«El problema que tenemos es del euro». Así justificaban el Gobierno y el PP hace casi dos años el entonces incesante ascenso de la prima de riesgo española. Era el 18 de junio, la Ejecutiva del partido que lidera Mariano Rajoy se había reunido una semana después de anunciarse que España pedía auxilio a la UE para sanear su banca y la temida referencia -que compara el rendimiento de los bonos a 10 años de los socios europeos con su homólogo alemán-- acababa de superar hace escasas fechas la frontera psicológica de los 500 puntos en una escalada que la llevaría a tocar el récord histórico de los 658 a principios de agosto. Hoy las tornas se han vuelto y el dato que daba miedo es ahora motivo de satisfacción, e incluso autoalabanza, desde el Ejecutivo.
Para la vicepresidenta Soraya Sáenz de Santamaría, el descenso de la prima de riesgo desde principios de año, aún con algunos altibajos -como el que la elevó hasta los 180 puntos a mediados de mayo-, «confirma el respaldo» de los mercados a España. De forma retórica, ayer llegó incluso a calificar de «confianza en vena» esa caída de la rentabilidad que se exige a las emisiones de deuda española porque, a su juicio y frente a las críticas que recibe desde la oposición parlamentaria y los sindicatos, sí «conlleva un efecto real sobre empresas y personas».
Pero, ¿a qué se debe la bajada de la prima? Sobre todo, según la número dos del Ejecutivo, al «amplio proceso de reformas» emprendido en España desde la llegada de Rajoy a La Moncloa y también en la Unión Europa. En este sentido, señaló que «la mejora de la financiación de las administraciones también es una mejora de la financiación para las empresas». Atrás quedan los «ataques al euro» a los que se achacó la crisis de la deuda de 2012. Ahora, apuntó Sáenz de Santamaría, «ya no hablamos de ella (en referencia a la prima de riesgo) en este país» porque -dijo en tono irónico- «como va bien la hemos sacado de la 'familia'».
La renombrada prima cayó ayer un 5,5% hasta los 121 puntos, el nivel que tenía a mediados de mayo de 2010, justo cuando el entonces presidente José Luis Rodríguez Zapatero presentó su primer gran plan de ajuste presionado por la comunidad internacional -«Europa le ha cantado las cuarenta», criticaba quien era en esa época jefe de la oposición, Mariano Rajoy-. La bajada, no obstante, fue generalizada en toda Europa. En Italia, por ejemplo, descendió un 4,8% hasta quedar en los 133 puntos, mientras que en Portugal lo hizo un 8,5% para situarse por debajo de la barrera de los 200 puntos. Francia, Bélgica, Irlanda o la propia Grecia, entre otros, siguieron un camino similar durante la jornada.
Las Bolsas, hacia arriba
Las Bolsas europeas, como era de prever, también cerraron en verde. La mayor subida se la anotó el índice selectivo español. El Ibex-35 -con bancos y constructoras a la cabeza- mejoró un 0,9% y alcanzó los 11.164 puntos, camino del nivel que tenía en abril de 2010, antes de que anunciara el primer gran 'tijeretazo' en España. Milán también ganó un 0,82%, Londres un 0,24%, Fráncfort -en máximos históricos- otro 0,22% y París un 0,17%. Todas siguieron aprovechándose del 'carburante' financiero -400.000 millones de euros para empujar el crédito a hogares y 'pymes'- que aprobó el jueves el Banco Central Europeo, si bien el euro parece consolidado en un cambio próximo a los 1,36 dólares.
El viento favorable también predomina en Wall Street con sus principales índices en niveles récord. Con todo, España ya paga menos intereses por su deuda que Estados Unidos. Puede ser flor de un día, si bien ayer el tipo del bono español a 10 años cerró en el 2,57%, su mínimo histórico y por debajo de la rentabilidad del 2,61% que se exigía a su homólogo norteamericano, algo que no pasaba desde abril de 2010, es decir, de nuevo la referencia al primer castigo importante a España por sus excesos pasados. Al tiempo, curiosamente, el bono alemán repuntó un poco hasta rozar el 1,38%.
Con todo, los analistas insisten en que «hay que tener prudencia», como apuntaba ayer Felipe López-Gálvez desde Self Bank. Desde las instituciones -Ministerio de Economía y CNMV, sobre todo-, no obstante, se quiere convencer a las empresas -fundamentalmente a las financieras- de que aprovechen para emitir deuda y que, sobre todo, lo hagan en España. Y es que desde comienzos de 2013 las emisiones de compañías nacionales fuera de España han superado los 61.000 millones de euros, frente a los cerca de 75.000 que lanzaron desde dentro del país.