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ESPAÑA

Duran prepara su dimisión como número dos de CiU por el enfrentamiento con Más

El líder de Unió amenaza con partir la coalición y presentarse en solitario a la Generalitat en caso de plebiscitarias

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CiU lleva camino de convertirse en la primera víctima colateral del proceso soberanista emprendido por Artur Mas hace año y medio. El número dos de la federación nacionalista y portavoz en el Congreso, Josep Antoni Duran Lleida, podría anunciar en breve su dimisión como secretario general de CiU.

La renuncia parcial sería el inicio de movimientos de mayor calado en el tablero catalán, que podrían hacer saltar por los aires la coalición que mantienen Convergència y Unió Democrática desde 1978. Y es que, en principio, el líder democristiano tiene intención de permanecer como presidente del grupo de CiU en Madrid hasta el final de la legislatura, momento en que pondría fin a más de diez años en el puesto. Duran no repetirá como cabeza de lista a las generales, pero tiene guardada una bala en la recámara para el caso de que Mas convoque elecciones plebiscitarias como alternativa a la consulta y apueste de manera inequívoca por la independencia, de la mano de Esquerra. Su advertencia es que, llegado el supuesto, Duran rompería con CiU y encabezaría una lista propia de Unió (el 25% de la federación) defendiendo un proyecto no rupturista con España y de corte confederal. El dirigente democristiano amaga desde hace meses con esta idea, que desliza en sus encuentros privados con periodistas y empresarios, aunque hasta la fecha solo era un arma para presionar a sus socios y que rebajen el órdago independentista.

Un viejo desencuentro

Sin embargo, fuentes de su partido reconocieron que, por primera vez, Duran reflexiona sobre su papel en la federación nacionalista. La número dos de la Generalitat y dirigente democristiana, Joana Ortega, aclaró que aún no hay decisión tomada, pero confirmó que Duran medita renunciar. Se trata, dijeron, de una decisión personal de Duran y no habrá anuncio oficial hasta después del 19 de junio, día de la proclamación de Felipe VI. Desde Convergència, «perplejos», replicaron que si deja la secretaría general tendrá que abandonar la portavocía en el Congreso.

Las relaciones entre Duran y los dirigentes de Convergència más soberanistas, como Francesc Homs o el propio Mas, hace tiempo que son manifiestamente mejorables. Existen choques personales, pero el problema es ideológico. Duran está a favor de la consulta catalana que Mas pretende celebrar el 9 de noviembre, pero considera que Convergència ha ido demasiado lejos en su desafío secesionista. Se dice que hace año y medio Mas y Duran acordaron llegar juntos hasta la consulta y que, a partir de ahí, ya se vería. La ruptura puede llegar incluso antes. La gota que colmó el vaso fue la abstención de CiU en la ratificación de la ley de abdicación. El líder democristiano abogaba por votar sí por la estabilidad institucional, si bien sus socios querían marcar distancias, desligarse, y Duran tuvo que ceder.

El portavoz de CiU advirtió hace tiempo que se siente «atrapado». Reconoce que no ha conseguido reconducir a CiU a la senda moderada -Mas no está dispuesto a levantar el pie del acelerador de la secesión- y que no ha logrado reconstruir los puentes de diálogo entre Madrid y Barcelona. Aunque fue explícito al alertar de una declaración unilateral de independencia, tampoco logró que Mariano Rajoy presentase una propuesta que desactive el proceso. Ha perdido su interlocución en Cataluña y en el Gobierno y está cerca de decir basta.

Su marcha traerá consecuencias en todos los ámbitos. El Gobierno se quedará sin uno de los últimos puentes que le quedan en el nacionalismo catalán y agotará el penúltimo cartucho para reconducir el pulso. Sin Duran en primera línea, CiU entrará en una fase de mayor radicalidad. La ruptura de la coalición abriría también las primeras grietas en el frente soberanista. Primero se descolgó el PSC, Unió está cerca de hacerlo y en Iniciativa también hay movimientos. Si Unió se desmarca, CDC y ERC podrían ir juntas a las plebiscitarias.