Un español pone en jaque al candidato uribista en Colombia
LA HABANA.Actualizado:La campaña electoral colombiana acabó el domingo pero está más caliente que nunca. El español Rafael Revert se ha convertido en testigo protegido de la Fiscalía al entregar el vídeo que él mismo grabó -tiene al menos otros ocho- mostrando la relación entre el candidato uribista Óscar Iván Zuluaga y el 'hacker' Andrés Sepúlveda, encargado de promover su campaña en las redes sociales y que habría ido más lejos, al espiar a los delegados de los diálogos de paz entre el Gobierno de Juan Manuel Santos y las FARC. Álvaro Uribe, expresidente y ahora senador, afirma que es un montaje del santismo, pero estas revelaciones y otras recientes vinculándolo de nuevo al paramilitarismo ponen el jaque sus ambiciones de impulsar a su delfín a la presidencia.
Junto a Zuluaga, quien inicialmente negó conocer a Sepúlveda y ha anticipado que no renunciará a sus aspiraciones, está siendo investigado Luis Alfonso Hoyos, exasesor de su campaña. En un video grabado por la revista 'Semana' se oye a ambos políticos conversando con el 'hacker' sobre temas de seguridad nacional colombiana y de cómo contrarrestar a sus rivales electorales.
Y todo por Revert. El joven informático fue reclutado por Sepúlveda en un 'campus party' (feria informática) y negoció por Skype su trabajo como consultor especializado en seguridad de la información por un salario de seis millones de pesos colombianos (unos 2.300 euros) mensuales.
Es un ingeniero con máster en Ciencias de la Seguridad de la información del SANS Institute, estudios en informática de la Universidad de Cataluña e ingeniería informática de la Universidad de la Sabana. En internet se presenta como consultor y experto en temas como auditoría web, 'cloud computing' y gobierno electrónico que realizó trabajos en las elecciones de Ecuador como «Antiddos, HoneyNet, Ethical Hacking».
Móviles como micrófonos
En su declaración ante la Fiscalía, Revert dijo que tenía tal confianza con Sepulveda que éste le «dio entrada a todos sus círculos de confianza». Tomando distancia, el 'hacker' colombiano dijo que la función de su subalterno en la campaña era mantener «toda la protección de la información, garantizar que no se sufrieran pérdida de informaciones y blindaje de la sede». Sin embargo, también le acusa de contactarlo con uno de los encargados de la oficina de espionaje militar ilegal descubierta en febrero, quien les ofreció un programa para convertir los móviles BlackBerry de los negociadores de las FARC en micrófonos y cámaras, y que les vendió «20 correos y contraseñas», entre ellas los de Iván Márquez y Timochenko, los dos principales jefes de la guerrilla.
En su testimonio, Revert lo niega. Afirma que «sólo sabía que Andrés tenía contactos con un general del Ejército que estaba preso». Con respecto al trato con Zuluaga, señaló que él informaba al candidato de «cómo iban las cosas. Tengo audios, vídeos, fotografías. Yo me hice el huevón y empecé a guardar todo, porque él intentó involucrarme en lo ilícito y yo no me iba a prestar. Yo nunca hice nada ilegal».