Vecinos repelen un ataque de Boko Haram y matan a 200 terroristas
Actualizado:Boko Haram ha sufrido el mayor revés de su última escalada bélica con la pérdida de 200 combatientes, abatidos en su último ataque contra una población civil. La milicia radical fue repelida por las autodefensas populares de la localidad de Kala Balge, asaltada durante la madrugada de ayer. Los vecinos, informados previamente del ataque, capturaron a varios guerrilleros vivos además de hacerse con motocicletas y vehículos armados. La población se sitúa en las inmediaciones del lago Chad, cerca de la fronteriza Gamboru Ngala, donde los insurgentes provocaron la muerte de 400 residentes en dos incursiones sucesivas llevadas a cabo a lo largo de la pasada semana.
El secuestro de las alumnas de Chibok sigue monopolizando el interés informativo, pero tan sólo se trata de una operación más dentro de la constante ofensiva de los 'yihadistas' contra asentamientos civiles en el norte del país, atentados que suelen provocar masacres indiscriminadas, masiva destrucción de viviendas, saqueos y desplazamientos.
La televisión local también ha mostrado la indignación de los supervivientes de Gamboru, que fue prácticamente arrasada por los radicales sin que las tropas acudieran en su auxilio. A las protestas de los ciudadanos, que sienten la desprotección de la Administración, se sumó ayer la de un contingente de soldados que abrió fuego al paso de un convoy que se dirigía a un cuartel de Maiduguri, la capital de Borno, para protestar por el retraso en el pago de salarios y la falta de equipamientos en su lucha contra los terroristas, según algunas fuentes. No se produjeron víctimas.
La liberación de las jóvenes también ha generado cierta polémica en la opinión nigeriana. Frente a quienes se felicitan por la ola de solidaridad, crece una tendencia temerosa de que la acción conjunta de las fuerzas nativas y los expertos extranjeros desemboque en un baño de sangre, dada la extrema crueldad mostrada por los hombres de Shekau y su gran capacidad bélica.