«Está bien promover precios bajos, pero no artificialmente bajos»
Advierte a la UE de que si no modifica la regulación actual «será imposible mantener» las elevadas inversiones que hacen falta para las nuevas redes Antonio Coimbra Consejero delegado de Vodafone España
MADRID. Actualizado: GuardarVe tan normal la guerra de precios entre operadoras como anormal que el regulador europeo no apueste por una mayor concentración en el sector de las telecomunicaciones para no perder la carrera frente a EE UU y Asia. Palabra de Antonio Coimbra, consejero delegado de Vodafone España.
-¿En qué fase se encuentra la larga guerra comercial de precios entre las operadoras?
-No sabría decirlo. Para nosotros, esas batallas son algo natural porque buscan tener un mercado más competitivo. Cada uno intenta presionar al otro y buscar los huecos donde puede aumentar presencia.
-¿Dónde hay más batalla, en 4G o en banda ancha?
-La guerra más fuerte se está dando en los paquetes convergentes, es decir, en las ofertas que combinan 4G y fibra, combinan fijo y móvil, voz y datos... Seguro que en el futuro va a crecer la competencia ahí, con la banda ancha ultrarrápida. Vodafone, tras la compra de ONO, está preparada para liderar esa batalla.
-¿Cómo se lleva competir con una empresa que, al mismo tiempo, es aliada tuya en otro campo? Por ejemplo, su caso y el de Orange.
-Pues con normalidad dentro de lo posible. Ese tipo de acuerdos suelen ser más bien para compartir redes y ahorrarse así costes de inversión, mientras que en el mercado seguimos compitiendo unos con otros. En nuestro caso, tenemos las reglas muy claras de lo que compartimos y lo que no. En abril empezamos a desplegar fibra de forma conjunta con Orange en varias provincias y por ahora todo transcurre bien.
-Y la compra de Ono, ¿no les puede hacer repensarse ese pacto?
-Esa operación no es un punto de llegada, sino de partida. Es decir, tenemos claro que debemos seguir desplegando redes y desarrollando innovaciones, lo cual implica acuerdos comerciales con otros socios para, a su vez, ser más eficiente.
-En un sector donde los ingresos por servicios de telecomunicaciones siguen en retroceso -un 7,2% menos en 2013-, ahorrar costes será un aspecto clave, ¿no?
-Sin duda, aunque estamos ante un problema que no es sólo de España, sino también de Europa. El sector sabe que es muy difícil de mantener esta situación en el tiempo, ya que la regulación ha impedido obtener los retornos necesarios para cubrir las sumas invertidas. Estamos empezando una nueva generación de comunicaciones en fibra y 4G y, sin embargo, Europa se está quedando atrás por ese problema. Resulta del todo imposible mantener las elevadas inversiones que requiere el despliegue de las nuevas redes cuando los ingresos y las rentabilidades no paran de mermar.
-Pero, ¿quiénes son los responsables de ese 'problema'?
-Quienes invierten son las empresas pero son los reguladores los que pueden cambiar las normas si realmente quieren aumentar la competitividad. Es imposible que un mercado con más de 100 operadores, como el europeo, pueda competir con otro como el de Estados Unidos, que apenas tienes seis o siete, o China, que cuenta incluso con menos.
-¿Igual hay que invertir menos y aumentar aún más la eficiencia?
-Somos los primeros en no verle sentido a tener tres o cuatro grandes redes de fibra. No es lógico ni hay forma de explotarlo. Sería, por ejemplo, como si hubiera tres grandes autopistas o líneas de AVE entre Madrid y Barcelona... impensable. Lo que hay que hacer es buscar fórmulas de compartir inversiones sin que merme la competencia. Es imposible justificar, desde un punto de vista económico, tener más de dos grandes infraestructuras de red.
-La Comisión Europea ha denunciado que España sufre los segundos precios más caros para acceder a internet, ¿cómo lo valoran?
-Es una vergüenza que se hagan informes con datos que no son homologables entre sí. Por ejemplo, la oferta de ADSL existe, pero hoy en día ya no se vende por separado, no es rentable. Lo que se comercializan son paquetes convergentes. La Comisión sólo ha comparado ofertas aisladas que existen en un país, pero cambian en otro. No transmite la realidad. Si la comparación hubiera sido bien hecha, se vería que los precios del ADSL en España, incluido en los paquetes convergentes, son de los más competitivos en Europa
-En su lista de quejas ante Bruselas, ¿la primera es fomentar una mayor consolidación del sector?
-Se trata de tener condiciones más uniformes entre gestión del espectro y regulación. Procurar a toda costa la supervivencia de operadores virtuales que no invierten ni en un euro en redes no tiene sentido. Es bueno que se promuevan precios bajos, pero no artificialmente bajos. De lo contrario, no se generará la caja necesaria para cubrir las fuertes inversiones que hacen falta en Europa. Las telecomunicaciones son tan esenciales hoy como la energía.
-Los consumidores también se quejan de la atención que reciben.
-El sector se ha enfocado tradicionalmente mucho más en precio que en calidad. Y eso se ha notado en las quejas de los clientes, aunque en Vodafone estamos decididos a cambiarlo empezando con un plan de transformación de las tiendas.