Es noticia:
ABCABC de SevillaLa Voz de CádizCádiz
Una niña bebe agua mientra acompaña a su madre a hacer la compra en un supermercado. :: MITXEL ATRIO
Sociedad

Los 'súper', aliados contra la obesidad infantil

Disponer de grandes superficies evita que acudan con regularidad a comer a restaurantes de comida rápida o de alimentos preparados Los menores que viven más cerca de ellos toman más frutas

EDURNE MARTÍNEZ
MADRID.Actualizado:

Vivir cerca de un supermercado puede suponer una ventaja para los niños con sobrepeso. Según un estudio presentado esta semana en la reunión anual de la 'Pediatric Academic Societies' en Vancouver (Canadá), esto puede ser un factor clave para el éxito de los programas de ayuda a niños con obesidad.

De acuerdo al informe, los niños que viven cerca de estos establecimientos mejoran su peso porque los que residen en barrios o pueblos en los que no tienen fácil acceso a alimentos frescos y saludables tendrán mayores problemas para saber cuál es la alimentación más adecuada. Estos casos son conocidos como 'desiertos de alimentos' en el estudio. En lugar de los supermercados, estos lugares a veces solo cuentan con restaurantes de comida rápida y tiendas de 'olvidos de última hora' que no ayudan a la concienciación del niño respecto a la alimentación saludable.

Los autores del estudio examinaron los datos de un ensayo aleatorio y controlado que se realizó en catorce consultas pediátricas de Massachusetts con niños de 6 a 12 años. El ensayo comparó dos programas. Uno basado en el apoyo al médico para tratar a los pacientes obesos y otro basado en el entrenamiento de los padres para que pudieran enseñar a comer a sus hijos. Un tercer grupo mantuvo la atención habitual.

Los resultados apuntan a que los niños que vivían cerca de un supermercado comían más vegetales y frutas que los demás. Por otro lado, el estudio mostró que la cantidad de bebidas con azúcar no se vio afectado por la distancia al supermercado. La autora principal del estudio y doctora en el Hospital pediátrico de Boston, Lauren G. Fiechtner, explicó que «a medida que un país se esfuerza por mejorar la salud de sus hijos, hay que mirar más a los barrios de los niños y ofrecer opciones más fáciles y saludables para la familia».

Datos nacionales

En España, los niños ingieren más proteínas de las que necesitan, lo que aumenta el riesgo de obesidad infantil a partir de los 8 o 10 años. El 95% de los menores españoles entre los siete meses y tres años exceden el consumo diario recomendado de proteínas en un 200%, el doble, según el estudio Alsalma 2.0.

El trabajo desvela una relación directa entre la ingesta de proteínas y el índice de masa corporal. Es decir, cuantas más proteínas, más crece este índice, lo que conlleva un mayor riesgo de sobrepeso. Y es que los niños evaluados nacían con la masa corporal recomendada por la OMS, pero según crecían se acercaban al sobrepeso. Un problema en España afecta a casi uno de cada tres niños menores de 12 años. El estudio detectó que el principal déficit alimenticio en los niños de entre siete a doce meses era el hierro, mientras que en los menores de entre 13 meses y 36 la carencia más importante tenía que ver con la vitamina D.