Unas 800 parejas españolas contratan cada año vientres de alquiler en el extranjero
MADRID.Actualizado:Alrededor de 800 familias españolas contratan vientres de alquiler en países extranjeros cada año, ahora la mayoría en Ucrania, ya que la denominada maternidad subrogada está prohibida por la legislación española. Este proceso, que cuesta de 50.000 a 200.000 euros, sólo cuenta con cobertura jurídica en EE UU, Ucrania, Rusia, México, Georgia y Kazajistán, según explican a Efe los expertos de Subrogalia.
En España, la maternidad subrogada no está permitida, pero hasta el pasado febrero -gracias a una circular aprobada en 2010- se admitían las sentencias judiciales de países donde estaba permitido y donde se reconocía la paternidad de los que pagaban el vientre. Ahora, según Diego Sánchez, presidente de Subrogalia, sólo puede inscribirse al bebé como hijo del padre varón, que suele ser también el biológico, y la madre debe tramitar la adopción en España después de que la madre de alquiler haya renunciado al bebé.
Requisitos
Para contratar un vientre de alquiler, la pareja interesada se desplaza hasta el país seleccionado para que el hombre done su esperma y se realice una fecundación in vitro, ya sea con los óvulos de la madre contratante o con los de una donante, y luego regresan a España. Sánchez recalcó que una madre de alquiler no es nunca donante de óvulos, es decir, no aporta su material genético al bebé, un factor que permite después «la desvinculación legal».
Durante todo el embarazo, la madre de alquiler vive en apartamentos que ofrece la misma clínica médica en la que se realiza la fecundación y, cuando nace el bebé, acude al consulado español para hacer la inscripción en el registro. «Hace cuatro años, Estados Unidos era el primer destino y representaba un 80 % de todas las parejas españolas», informó Sánchez, que agregó que actualmente sólo supone un 15 %.
Aunque el destino más frecuentado actualmente es Ucrania, donde hay clínicas que ofrecen un número ilimitado de implantaciones a precios cerrados, México está ganando protagonismo porque, a diferencia de Ucrania, esta práctica está permitida a homosexuales y solteros.
Según los expertos que participan en el encuentro, la contratación de madres de alquiler, en auge, debe parte de su éxito a las trabas burocráticas de la adopción, sobre todo internacional, que suele ser el último recurso después de haber intentado la fecundación in vitro y la adopción, aunque también cuenta el deseo de tener un hijo biológico.