Madrid se vigila a 254 km/h
La Policía Municipal de la capital adquiere dos Renault Mégane RS de 265 caballos que solo se utilizarán para escoltar a las autoridades
Actualizado:A buen seguro, Esperanza Aguirre lo tendrá más difícil la próxima vez que quiera huir a toda velocidad de los agentes después de un enfrentamiento en la calle. La Policía Municipal de Madrid contará, en breve, con dos nuevas bestias sobre el duro asfalto de la capital: dos Renault Mégane RS. Estas máquinas atesoran en su interior 265 caballos de potencia y son capaces de alcanzar los 254 kilómetros por hora. Poca broma para un automóvil que ya se erige, por méritos propios, como el vehículo estrella de la nueva flota madrileña, que además contará con decenas de nuevas unidades del Mégane original, y con la que el cuerpo de la capital rodará a partir de mayo.
Pese al espectacular cambio -los dos vehículos, disponibles en su versión comercial a partir de los 31.500 euros, sustituyen a dos Volkswagen Passat de la unidad especial de Tráfico UET-, las razones de la renovación de la flota son mucho más prosaicas. «Una parte del 'renting' vencía este año y otra parte, más pequeña, lo hará dentro de dos», explicaban ayer desde el Ayuntamiento de Madrid. Así las cosas, antes del verano serán 345 nuevos vehículos policiales -75 motos y 270 automóviles de cuatro ruedas- los que recorran las calles de Madrid.
Quizá lo más sorprendente de todo es que el deportivo de la casa francesa solo dispone de una versión de tres puertas, así que no serán utilizados para practicar detenciones. Porque, ¿dónde meter a los arrestados, si no hay sitio suficiente en la parte de atrás? Y que nadie espere tampoco persecuciones de película ni escenas dignas de un 'Fast & Furious' a la española. Fuentes del Consistorio madrileño ya avisan de que estos dos vehículos desempeñarán labores «fundamentalmente de carácter institucional», acompañando, por ejemplo, a los miembros de la Casa Real cuando abandonen Madrid.
Es, de hecho, el mismo trabajo que, desde junio de 2013, realiza el Volkswagen VW Phaeton que Alberto Ruiz Gallardón adquirió y blindó como coche de representación cuando era alcalde de Madrid. Abandonado en el garaje desde 2010, la actual regidora de Madrid, Ana Botella, decidió recuperarlo para el cuerpo municipal.
Junto a la renovación de la flota, se irá cambiando progresivamente la imagen y los rotulos de los coches policiales, que pasaran del blanco predominante en los coches actuales de un azul oscuro con las letras impresas en blanco.
Como el VW Phaeton, cuando los nuevos Mégane RS no estén ocupados escoltando a algún alto cargo, «trabajarán en la circunvalación de la M-30, realizando labores de control de tráfico». Quizá entonces la presidenta del PP madrileño se lo piense dos veces antes de emprender la huida.