Obama despide a su «histórica» ministra de Sanidad

Cuando un ministro anuncia el fin de su gestión lo último que quiere escuchar del presidente es que ha pasado «por baches» y le ha sacado «cardenales». Con todo, Barack Obama terminó por arrancar una sonrisa a la estoica Kathleen Sebelius cuando añadió: «Lo arregló, hizo el trabajo y los números finales hablan por sí solos: 7,5 millones de personas con seguro médico».

La ministra de Sanidad saliente, a la que calificó de «histórica», ciertamente pasará a los libros por la reforma sanitaria que se aprobó bajo su cargo, aunque su puesta en marcha dejará un borrón en su expediente. «Viene de una familia de políticos, puede con ello», dijo a MSNBC la asesora presidencial Valerie Jarret, que la noche antes cenó con ella a modo de despedida. Ciertamente Sebelius ya sabía que aceptaba una patata caliente cuando fue nombrada. «Por algo ningún otro presidente lo había logrado», recordó ayer, pero lo que nadie imaginaba es que su mayor dolor de cabeza sería la activación de un portal de internet que no fue capaz de soportar la demanda.

No eran ya las críticas de la oposición, sino la exasperación de los usuarios con los continuos fallos técnicos que se sucedieron desde el primer día de octubre en que se puso en marcha hasta la medianoche del último día de marzo en que se acabó el plazo para contratar la póliza de seguro médico. Los que no lo lograron tendrán que pagar una penalización en su declaración de la renta y esperar hasta el próximo año para disfrutar de la histórica reforma sanitaria que les obliga a tener un seguro médico de carácter privado.