Tres puntos de inflexión

Germán, otra vez Germán, y las jugadas de estrategia salieron ayer al rescate de un San Fernando que se toma un pequeño respiro en la clasificación tras doblegar al Granada B en el estadio Iberoamericano 2010.

Sancionado la semana pasada, el polivalente jugador isleño regresó al once para hacer posible un nuevo triunfo de su equipo en Bahía Sur. Un triunfo marcado por el sufrimiento y la tensión. Y eso que el Granada B, ya salvado y sin problemas en la tabla, llegaba con ocho bajas y dos porteros juveniles a La Isla.

Dios y ayuda le costó al San Fernando. Pese a todo, los isleños empezaron con mordiente ante el filial nazarí. De hecho, a los dos minutos sacó Ocaña a relucir su magia para driblar a varios oponentes y poner un balón de oro a Jorge Herrero. Sin embargo, al jerezano se le nublaron las ideas ante el portero y remató al cuerpo de este último.

Masegosa repetía la experiencia de hace una semana en Sanlúcar y colocaba a Iván Guerrero por la derecha y a Eder a pierna cambiada en la izquierda. Juanje se quedaba de nuevo en el banquillo. Y por ahí quería atacar Joseba Aguado, que pretendía que sus veloces extremos crearan peligro. Tal es así que el exazulino Álvaro García puso un centro al que Nico no llegó por poco. El propio Nico también lo intentó, aunque sin fortuna.

Pero, sin lugar a dudas, la gran ocasión de los rojiblancos la tuvo el excadista Wilson Cuero. Ahí estaba David Valle, colosal, para evitar el 0-1 a los once minutos.

Paco Borrego, Ocaña, Iván Guerrero y Jorge Herrero intentaron cambiar el rumbo de un partido plano y escaso de verticalidad. También se reclamó tímidamente un penalti sobre Abel Molinero. Fueron acercamientos para apuntar en las estadísticas. Nada más allá de eso. El Granada B maniataba a la perfección a un inoperante equipo isleño. Por si fuera poco, los resultados no acompañaban y la intranquilidad se palpaba en Bahía Sur.

Intenso salió el San Fernando en la segunda parte y el gol estuvo cerca a los cinco minutos. Una falta botada de manera magistral por Abel Molinerol fue tocada por Cristian y el larguero. Adri Gallardo acudió al rechace, pero envió alta la pelota. Intentaba responder el Granada B con tímidos intentos de Sergio Martín y Uche, aunque los locales no sufrían en exceso.

Pasaba el tiempo y la parroquia azulina se desesperaba con la actuación de De la Fuente Ramos, que señaló una amarilla a Ocaña en una acción en la que el fino centrocampista isleño pudo ser objeto de un penalti. La teoría de Masegosa se confirmaba: esta temporada no acompañan las decisiones de los trencillas.

El balón parado, clave

La grada se calentaba, el presidente Daniel Luna abandonaba el palco preso de los nervios y el míster daba entrada a Zafra. Y este último, que estuvo a punto de superar a Cristian, forzó poco después el córner de la victoria. Abel Molinero sacó y Germán, otra vez Germán, entró como un obús para colocar el 1-0 en el marcador. Era el minuto 71 y la estrategia jugó otra vez a favor de los isleños.

De ahí al final, Masegosa daba entrada a Cristian Terán y José Vega. El segundo tanto no llegaba, pero había que mantener la renta. Y ahí apareció una vez más la figura del inmenso David Valle, que salvó el empate en el 82' tras un córner.

Boateng tuvo en sus botas la última ocasión rojiblanca, pero el cuero salió rozando el larguero. No hubo más sustos y Bahía Sur vibró con la victoria. Tres puntos de inflexión llegaron para un San Fernando que, al menos ayer, pernoctó en las plazas de permanencia.