Esquerra impide la declaración institucional del Congreso en honor de Suárez

Los independentistas catalanes de Esquerra impidieron hoy que el Congreso de los Diputados pudiese leer una declaración institucional para honrar la memoria y homenajear la figura política de Adolfo Suárez. Para que esta práctica sea posible debe contar con la unanimidad de todos los grupos de la cámara y los republicanos, que por turno son en este momento los portavoces del Mixto, se negaron a dar el visto bueno al documento porque no ven “nada modélico” en la Transición ni en el papel que entonces jugaron Suárez y el Rey, entre otras cosas porque recuerdan que no legalizaron a su partido hasta después de las primeras elecciones democráticas de 1977.

El Congreso, así, se tuvo que conformar con guardar al final del pleno un minuto de silencio en recuerdo del expresidente, del que se ausentaron tanto los diputados de ERC como los Amaiur y el Bloque Nacionalista Gallego, y al que siguió una cerrada y prolongada ovación, precedido de unas palabras en homenaje a Suárez dichas a título personal por el presidente de la cámara, Jesús Posada, que, eso sí, después fueron hechas suyas por el resto de grupos parlamentarios.

Posada hizo llegar su “profundo y sincero pesar” a la familia del expresidente y “nuestro reconocimiento y homenaje a su memoria y a su figura política”.

El Senado, que sí que pudo aprobar horas antes una declaración institucional previa al minuto de silencio, proclamó, a través de la voz de su presidente, Pío García Escudero, que “la sociedad española estará siempre en deuda” con Suárez, “por haber conseguido personificar el valor del consenso” y “por haber entregado su vida al logro de la consecución de la libertad de sus conciudadanos”. El expresidente, a quien describió como “una persona sensata, un luchador por la libertad y, sobre todo, un hombre de Estado”, fue, según la declaración, “de la mano de don Juan Carlos, la figura política de conciliación que nuestro país requería para poder llevar a cabo la Transición”. “Tenemos el deber de honrar su memoria y de seguir su ejemplo”, concluyó.

Amaiur, a través de su portavoz, Xabier Mikel Errekondo, anticipó desde la mañana que, como ERC y BNG, se ausentarían del minuto de silencio y que rechazaban cualquier declaración institucional porque para ellos Suárez es “una figura que supuso la continuidad de los principios del franquismo”, que inauguró la “negación de los derechos del pueblo vasco”, y que, “junto al Rey y al Ejército, perpetuó la España una, grande y libre”.

Los tres partidos independentistas fueron también los únicos del arco parlamentario que no acudieron el lunes y martes pasado a la capilla ardiente y a los actos realizados en el Congreso y en el centro de Madrid en honor de Suárez, que contó una amplísima participación de todas las opciones ideológicas.

Hijo adoptivo de Madrid

El expresidente del Gobierno Adolfo Suárez es desde hoy hijo adoptivo de la ciudad de Madrid, cuya corporación local ha aprobado hoy por unanimidad en sesión extraordinaria del pleno este reconocimiento a título póstumo del primer presidente electo de la democracia. Este nombramiento se suma a las medallas de Honor y de Oro de Madrid que le fueron concedidas en vida a Suárez por el Ayuntamiento de Madrid para reconocer la figura histórica del presidente que condujo a los españoles de la dictadura a la democracia, fallecido el pasado domingo.

La alcaldesa de Madrid, Ana Botella, ha ensalzado la talla histórica de Suárez, que según ha defendido se eleva por encima de los avatares de la crónica cotidiana de los tiempos que le tocó protagonizar. Botella ha destacado que todos los españoles tienen la obligación de tener presente el legado de unidad y de búsqueda del consenso del expresidente, que "abrió una nueva página de la historia de España de la que hoy todos los españoles seguimos siendo protagonistas sin excepción".

La alcaldesa de Madrid ha indicado que el reconocimiento formaliza el homenaje ciudadano de los últimos días al político en las calles de Madrid y su gratitud hacia el proyecto de unidad, concordia y pluralidad erigido por Suárez junto con el Rey "piedra a piedra" y consenso a consenso".