Competición expedienta a Ramos y Cristiano
Atiende la denuncia de los árbitros e investigará si las manifestaciones de los jugadores del Real Madrid atentan contra el buen orden deportivo
MADRID Actualizado: GuardarTal y como estaba previsto, el Comité de Competición de la Federación Española de Fútbol ha expedientado a Sergio Ramos y Cristiano Ronaldo después de que el colectivo arbitral denunciara sus declaraciones contra el colegiado navarro Undiano Mallenco y el sistema en general, tras el clásico del pasado domingo. Si se atienden los numerosos precedentes por hechos similares, el expediente se cerraría con su archivo o una multa de unos 1.500 euros. A priori, se debe descartar que pudiera haber una suspensión deportiva a los futbolistas del Real Madrid.
Tras analizar las polémicas manifestaciones de los dos jugadores, reproducidas en los medios oficiales del club, el presidente de los árbitros, Victoriano Sánchez Arminio, y el director técnico, Manuel Díaz Vega, decidieron remitir una amplia documentación a Competición, para que el órgano de justicia determinase si hay materia sancionable.
El proceso puede prolongarse durante dos meses. A partir de ahora se nombrará un instructor, que seguramente llamará a declarar a los protagonistas para que expliquen sus manifestaciones, se arrepientan o se ratifiquen. Frente a la primera resolución, el Real Madrid podría presentar alegaciones en diez días. Y se abriría un plazo de otros diez días hábiles para que los jueces deportivos resuelvan.
El Código Disciplinario de la FEF establece multas de hasta 602 euros y suspensiones de hasta cuatro partidos para conductas levemente contrarias al buen orden deportivo. Para las graves, el castigo oscila entre cuatro y diez partidos y la multa, entre 602 a 3.006 euros. Sin embargo, no hay precedentes recientes de partidos de inhabilitación por declaraciones contra los colegiados antes o después de los choques.
Tras el clásico, Cristiano compareció ante los medios para afirmar que vio a Undiano «blanco y muy nervioso», lo que le hizo pensar que «los partidos no se ganan sólo dentro del campo». Afirmó que igual los colegiados no quieren que el Madrid gane la Liga y garantizó que, desde su llegada al club blanco hace cinco años, su equipo nunca ha sido favorecido. Ramos habló de «descaro» y confió en que, por el bien del Madrid, Undiano no le pite más esta campaña.
Precedentes
La jurisprudencia es amplia. Hace cuatro años, Competición le impuso una multa de 15.000 euros a Pep Guardiola, técnico del Barça, por decir que Clos Gómez y su asistente mentían en la redacción del acta. Tras los recursos del club azulgrana, el Comité Español de Disciplina Deportiva redujo la multa a sólo 1.500 euros. En 2011, el Comité sólo afeó unas declaraciones de Mourinho contra Pérez Lasa. Y hace dos años, archivó un expediente incoado a Piqué por hablar de «premeditación» tras ser expulsado por Velasco Carballo ante el Sporting.
Cuatro jugadores fueron multados con 1.500 euros durante el curso pasado por declaraciones de este tipo. Wakaso (Espanyol) dijo que le sacaban tarjeta por racismo, los levantinistas Juanlu y Diop se quejaron de que Muñiz Fernández les robó frente al Madrid, y Di María dejó entrever que algunos errores arbitrales eran intencionados. En esta campaña, el sevillista Fernando Navarro recibió idéntico castigo por airear que, ante el Barça, Muñiz cometió un «robo que vio todo el mundo».