MUNDO

El 'brazo armado' del Maidán concurre a las urnas

Los ultraderechistas de Sector Derecho forman un partido y eligen a su líder, buscado por Moscú, como aspirante a la presidencia de Ucrania

KIEV. Actualizado: Guardar
Enviar noticia por correo electrónico

Los trenes pueden con la crisis que vive Ucrania y, de momento, siguen uniendo Simferópol, capital de Crimea, con Kiev diariamente y sin problemas para los viajeros. Militares ucranianos, acompañados de un perro para rastrear explosivos, suben a los vagones en la estación de Melitopol para echar un vistazo y revisar los pasaportes extranjeros, un trámite de apenas unos minutos en una línea muy popular que, tras el triunfo de la revuelta en Kiev, pensaban en Crimea que podía servir para transportar a miles de ultraderechistas a imponer su ley en la península.

Tal viaje no se ha producido y los más radicales, en lugar de pasar al ataque sobre el terreno, han optado por constituirse en partido político. Sector Derecho, el 'brazo armado' de la revuelta, celebró su congreso fundacional en Kiev y eligió a su líder, Dmitri Yarosh, candidato a los comicios presidenciales del 25 de mayo. La nueva formación integra a las organizaciones radicales desde las que nació el propio Sector Derecho cuando estalló la revuelta contra Víctor Yanukóvich: Patriotas de Ucrania y Tridente.

El salto a la política de Yarosh, en busca y captura por Rusia, coincidió con la visita a Kiev del jefe de la diplomacia alemana, el primer ministro canadiense y el secretario general de Naciones Unidas, que acudieron a apoyar a las autoridades interinas. La comunidad internacional trata de compensar con gestos la pérdida de Crimea y el canciller alemán, Frank-Walter Steinmeier, consideró lo sucedido en la península como una «tentativa de dividir a Europa».

Ban Ki-moon expresó su «solidaridad con el pueblo y el Gobierno de Ucrania» y felicitó a las autoridades de transición por la firma en Bruselas de los capítulos políticos del acuerdo de asociación con la Unión Europea. El acercamiento de Kiev a Bruselas ha sido paralelo al de Crimea y Sebastopol a la Federación Rusa, un movimiento que para la ex primera ministra Yulia Timoshenko supone «la pérdida para siempre de Ucrania» para Vladímir Putin.

Tras semanas de discusiones, la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa (OSCE) acordó enviar una misión de observación de seis meses a Ucrania para «reducir las tensiones y fomentar la paz, la estabilidad y la seguridad». Más de cien profesionales establecerán el cuartel general en Kiev y trabajarán en nueve ciudades del país, incluida Donetsk, donde hay gran presencia de población de origen ruso que protesta en las calles pidiendo un referéndum como el de Crimea.