La Generalitat ampara que los mossos se sumen a un grupo independentista
Actualizado: GuardarEl consejero de Interior de la Generalitat catalana, Ramón Espadaler, y los grupos del PP y Ciutadans mantuvieron ayer un agrio debate en la cámara autonómica a propósito de la existencia de 'Mossos per la Independencia', un colectivo adscrito a la Asamblea Nacional Catalana e integrado exclusivamente por agentes de la policía autonómica.
Para el máximo responsable de la seguridad ciudadana en la comunidad, este grupo, que nació hace dos años con el objetivo de defender Cataluña «en un momento de crisis nacional» y «hartos de las agresiones constantes que padece el país», se trata de una estructura sectorial de una organización, que es ajena al cuerpo.
«Le tenemos respeto con un límite muy claro, que la pertenencia a esta entidad no pueda poner en cuestión el ejercicio riguroso de policía», dijo el consejero en sede parlamentaria. La Generalitat argumenta que no se trata de un sindicato policial ni una organización del cuerpo de Mossos y que los agentes que integran el grupo participan a título personal y sin representar a la institución.
La existencia de este colectivo, en cualquier caso, levanta suspicacias entre los grupos de la oposición en el Parlamento catalán, teniendo en cuenta el momento político actual, marcado por el proceso soberanista, y que los Mossos d'Esquadra podrían ser requeridos en los próximos meses a actuar en situaciones extremas de defensa de la legalidad. Por ejemplo, si el próximo 9 de noviembre, día previsto para el referéndum, el presidente de la Generalitat decide sacar las urnas a la calle, aun sabiendo que la consulta ha sido suspendida por el Constitucional. Los agentes pueden verse ese día en la duda de si obedecen la ley española o la incumplen y siguen las órdenes de sus superiores y por tanto permiten que se abran los colegios y la gente vaya a votar en esa consulta.
De hecho, el actual consejero de Empresa, Felip Puig, afirmó en su día, siendo titular de Interior, que los Mossos estarían al servicio de la Generalitat si se prohíbe la consulta. Mas, de momento, ya ha movilizado a los Mossos para el 9-N. Una circular interna ha fijado el día de la consulta en el calendario de grandes despliegues policiales que ha programado el Gobierno catalán para este año.
En un caso mucho más extremo, los Mossos pueden verse implicados en un supuesto, poco probable, como el que apunta la propia ANC en la hoja de ruta que aprobará en su próxima asamblea del mes de abril, cuando habla de tomar el control de los puertos, aeropuertos y aduanas una vez declarada la independencia. El control actual de esas infraestructuras está hoy básicamente en manos de la Guardia Civil y por tanto el traspaso del poder de una policía a otra, si se ordenara, hay que adivinar que no sería coser y cantar.
«Partidista»
Ciutadans y el PP dejaron claro ayer que vigilarán de cerca a 'Mossos per la independencia'. «Atenta contra la imagen de cuerpo y su prestigio, es un ataque a la legalidad vigente dado que los miembros del cuerpo han prometido la Constitución y el Estatuto», afirmó Matías Alonso, de Ciutadans. Pere Calbó, del PPC, fue un poco más allá y acusó al consejero de «amparar» una «ilegalidad» y de «permitir la utilización partidista de los Mossos», que calificó como «su Policía». «Como máximo responsable de la policía catalana, y como dice la ley, debe garantizar la neutralidad del cuerpo de Mossos», dijo el diputado popular.
El consejero les advirtió de que si siguen por esta línea «nos haremos daño» y se defendió replicando al diputado del PP que no mostrara tanta indignación cuando sindicatos policiales españoles critican el presidente de la Generalitat por hablar en catalán o cuando dicen que « Cataluña está por lo civil o lo militar unida a España».
'Mossos per la Independencia' nació como un «grupo de ciudadanos que aman a su país y que no están de acuerdo con esta españolidad impuesta». «Este es un tren que no se para hasta que consigamos la independencia», dijeron.