Van Persie y De Gea levantan al United y hunden al Olympiacos

Es lo que tiene disponer de uno de los mejores delanteros centro del mundo. Gracias a un triplete de Robin van Persie, que se tuvo que retirar lesionado, en camilla, en el minuto 90, el Manchester United le dio la vuelta a la eliminatoria que tan complicada se le había puesto al equipo inglés tras el 2-0 de El Pireo, para salvar el orgullo de los ‘diablos rojos’ y evitar un rotundo fracaso. Así impidió el United lo que hubiera sido una tercera despedida europea consecutiva en octavos de final, en esta ocasión ante un rival menor que tuvo sus opciones en Old Trafford pero fue derribado por la experiencia y, sobre todo, por la enorme diferencia de calidad en ataque.

Tras caer la pasada temporada ante el Real Madrid en la primera eliminatoria directa y la anterior frente al Athletic en la Liga Europa, a la que fue condenado tras su fiasco en la primera fase de la ‘Champions’, y pasar ahora por un momento de muchas dudas y bastante delicado, el United estaba obligado a remontar en su estadio frente a un contrario muy inferior, y fue Van Persie quien se encargó de poner en su sitio al equipo inglés y devolver a la tierra al conjunto griego dirigido por Míchel.

El técnico madrileño pudo ilusionarse poco en el ‘Teatro de los Sueños’, porque le frustró Van Persie, pero también David de Gea, ya que el portero español del United firmó dos impresionantes paradas consecutivas aún con 1-0 en el marcador. Si no llega a ser por el exguardameta del Atlético, el Olympiacos hubiera empatado a un gol en la recta final del primer tiempo y habría hecho temblar los cimientos de Old Trafford. Al filo del descanso, sin embargo, el United igualaba la eliminatoria y en menos de una hora ya había remontado. Un penalti provocado por el propio Van Persie, una demostración de pegada en el segundo, a pase de otro futbolista que marca diferencias (Rooney), y un lejano tiro libre directo en el que falló Roberto certificaron un triplete del holandés y llevaron al cuestionado entrenador local, David Moyes, a echar a su equipo atrás descaradamente en la segunda mitad, para defender el resultado y dejarse dominar por un Olympiacos incapaz ofensivamente.

Mientras que Van Persie aprovechó prácticamente todo lo que tuvo, el Olympiacos pagó perdonar tantísimo en ataque en la primera mitad. Es la distancia que existe entre el ‘9’ holandés y atacantes tan limitados como ‘Chori’ Domínguez -De Gea le sacó un remate a bocajarro en la mencionada jugada decisiva- o Hernán Pérez, que al cuarto de hora también tuvo en sus botas medio pasaporte para cuartos -el Olympiacos hubiese repetido en la Liga de Campeones 15 años después-, pero mandó a las nubes gran parte de la eliminatoria. Esa grandísima ocasión para los griegos malograda por el paraguayo ya pudo cambiar por completo, antes de que De Gea se exhibiese, el desarrollo de un encuentro en el que el United forzó e impuso un alto ritmo cuando lo necesitaba pero, en cuanto tuvo el billete en sus manos, se arriesgó demasiado al recular tantísimo hacia su portería, pese a la nulidad visitante.

Como era previsible, el United se abrió muchísimo en la primera parte, porque no le quedaba otra con dos tantos de desventaja, y permitió muy peligrosas llegadas del Olympiacos. Sin embargo, De Gea se convirtió junto a Van Persie en el héroe del United, que vio en el inicio del encuentro cómo el conjunto de Míchel saltó al campo con atrevimiento, dispuesto a plantear en principio aquello como un cara a cara, aun consciente de la superioridad de clase y oficio de los ‘red devils’. Posteriormente, fue el United el que se encargó de asustar, con la contundencia de Van Persie, al reciente campeón de la liga griega, al que ya se le acabaron las oportunidades en el segundo tiempo, porque no tuvo ninguna claridad con el balón y se encontró con una muralla roja. Una mala noticia para el United es que no podrá contar con el sancionado Evra para la ida de cuartos y espera que Van Persie no sufra una lesión de gravedad tras resultar lesionado en una de las últimas jugadas. Porque con el holandés en el campo el United sí da miedo.