Un reglamento lleno de vacíos
Actualizado: GuardarEn el concurso actual, con poco que lo estudies, puedes hacer barbaridades sin que haya ningún artículo que te lo impida. Puedes inscribir por ejemplo una agrupación con doscientos componentes y puedes cambiar a éstos según te convenga. Puedes utilizar todo tipo de instrumentos en la presentación, estribillo y el popurrí sin que te obliguen como antes a que los instrumentos utilizados fueran en concordancia al tipo. Hoy en día puedes sacar un coro de romanos y acompañarlo con bajo eléctrico y batería o una chirigota de trogloditas y utilizar una tablet como instrumento alusivo de esa época. Otro vacío que podrás utilizar es empezar un tango o pasodoble con una introducción o falseta existente, me explico. Este año hemos visto a alguno llevar como falseta una pieza musical exactamente igual a una creada, es decir coger una canción y ponerla como falseta. Antiguamente se incorporaban trozos de otras canciones alusivos al tipo o al tema a cantar pero ahora, como el reglamento no dice nada en contra, las piezas musicales van copiadas al completo. Otro gran vacío y este muy preocupante es el plagio. Al no haber una comisión de investigación en el jurado, y a no ser que en el jurado los cinco miembros sean como Juanelo, Valdivia o Javi Osuna que tienen un conocimiento de agrupaciones de alto nivel, las músicas cada vez se parecen más a otras ya surgidas anteriormente. No hay nadie capaz de penalizar por plagio porque no hay nadie con la capacidad para hacerlo.
En fin que para el año que viene voy a inscribir a cien amigos del orfeón donostiarra para que en cuartos me interpreten un popurrí original y espectacular que previamente les he enviado para que lo ensayen, y para semifinales he encargado a mi amigo ingeniero informático de sonido que me haga una orquestación para el estribillo y el popurrí a base de chelos, violines, trompetas, violas, y tocarlo con mi portátil por Wi-Fi que eso de hacer con la boca los instrumentos como Allegro Molto Vivace está ya muy antiguo.
Esto se nos va de madre.