El Castillo de San Romualdo está pendiente de la última fase para poder abrir sus puertas. :: C. C.
SAN FERNANDO

San Fernando apuesta por los museos para reactivar sus índices turísticos

El cambio de ubicación del Centro de Interpretación, el Castillo de San Romualdo, el espacio de Camarón o el Molino de Mareas esperan su puesta en marcha

SAN FERNANDO. Actualizado: Guardar
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A falta de grandes complejos hoteleros y con una saturación en la provincia respecto a la oferta de sol y playa, que tampoco puede faltar, San Fernando precisa de elementos que diferencien su capacidad turística del resto de municipios. Una de las líneas cuya apuesta es más evidente es la de la creación de espacios museísticos. Con ellos se pretenden captar el interés de los visitantes y hacer que se desplacen por diferentes puntos de la ciudad, para dinamizar distintas zonas y repercutir en comercios y hostelería.

Un objetivo que está bastante avanzado si bien aún no se ha convertido en realidad, ya que cada equipamiento debe sortear los últimos pasos para poder abrir al público. El que está más avanzado es el Centro de Interpretación del Parlamentarismo que se ha mudado al Museo municipal. De esta manera se pretende completar las piezas que ya ofrece ampliando su recorrido, así como acercar a la calle Real un lugar cuya ubicación anterior demostró no se atractiva. En el caso del Castillo de San Romualdo se avanza en la última fase de sus obras. Aún queda determinar qué albergará, pero también contará con estancias dedicada a la historia de la ciudad.

En cuanto a Camarón, cada vez se está más cerca de que tenga la presencia que se merece en el municipio. Ahora mismo se trabaja en el inventario de piezas que se traerán, a la espera de cerrar la ubicación de su futuro museo. Se barajan distintas posibilidades como la Casa Lazaga, el edificio de Cruz Roja, la Casa de la Juventud o los juzgados de San José, las dos últimas a la espera de que la Junta reubique la sede judicial.

El centro de Interpretación del Molino de Mareas del Zaporito lo tiene todo a la espera únicamente de cerrar su gestión. Salió a licitación pública la concesión de un quiosco-bar encargado de su cierre y apertura, pero quedó desierto. El equipamiento ya realizó en mayo del año pasado unas jornadas de puertas abiertas para mostrar sus posibilidades.