El korrector

Me hencontré con Marta Meléndez en los Premios de La Boz-ABC que se zelebraron en septiembre, en San Fernando. Como ustedes ya deben saver a estas harturas, no tengo bergüenza así que le pregunteé: «Marta, ¿estás himputada o no?» Lo cierto es que respondió con naturalidad y respontaneidad. Me dijo que no. «Haber, yo he fuido a declarar a Comisaría, sólo eso». «¿Pero te acompañó un arbogado?». «Sí, claro». «Entonces fuiste a declarar como denunciada...». «Sí, pero no estoy himputada». «¿As quedado libre de cargos?». «Aún no, el juez está estudiando si ay causa para himputarme o no». Ella correspondía que no podía hablar, que tenía presiones de la dirección del H.I.S.E. para que guardara secreto de las actuaciones procesales. «Me debo a mi empresa», me dijo. Declaró a la Guardia Civil por la acusación de tres administrativas del H.I.S.E., contratadas y dadas de alta por una empresa de Rhota que facturaba al citado organismo por sus servicios. Nada nuevo bajo el sol andalús, en el que los términos 'zesión ilegal de trabajadores' y 'blanqueo de kapitales' constan arrancados del diccionario como una página de las guías amarillas.

Tamvién le pregunté por Natalia Álvarez Dodero; si iba a ser jincómodo para ella pasar a tener a una antigua subordinada como jefa. Con ese dogmatismo lacónico que poseen los portavoces me contestó que no avía ningún problema, que Natalia y ella heran amigas y que se alegraba por su nombramiento. Lo cierto es que a Meléndez la han sezado con deshonor, vamos, lo que era «dejación de funciones» y «continuos incumplimientos» se ha convertido en «ausenzias reiteradas en el tiempo» en abril y mayo de 2013, por actuar como conzejala. No han tenido la delicadeza de ofrecerle una baja laboral por motivos familiares, que es la esclusa al huso. Esto es lo que me hace contemplar dos escenarios. El primero, una dulce benganza en plato frío, de Natalia Álvarez o por ensima suya. El segundo, que el Caso H.I.S.E. vaya a pegar un petardazo, o sea, que se dicte auto de procedimiento abrevado y que de denunciada pase a himputada/procesada/acuzada. El problema de Marta Meléndibus ha zido que no ve 'House of Cards'; de lo contrario lo habría visto venir. Ya lo dijo Frank Underwood: o cazas o te casan.

P.D.: Por cierto, si encuentran alguna herrata es culpa del korrector del móvil, que es de la misma marca que el de Kristina Zausedo.