El ministro Cañete, el ausente más presente en Dublín

El PP llegó a ayer a Dublín con el objetivo de lograr el apoyo de los principales líderes del Partido Popular Europeo para que España recupere poder en Bruselas. Una pretensión que, según la delegación española, se ha conseguido con creces. Los populares presionaron, incluso, con la idea de presentar a última hora a Íñigo Méndez de Lugo como candidato a la Presidencia de la Comisión Europea. Y no para disputar la victoria, sino para presionar a alemanes y franceses que pujan por llevarse el gato al agua. Angela Merkel apoya al ex primer ministro luxemburgués Jean-Claude Juncker y Francois Hollande a su compatriota Michel Barnier.

Rajoy optó por Merkel para asegurarse que la canciller no vetara las candidaturas españolas a la Comisaría de Asuntos Económicos, a la de Agricultura o, incluso, a la Presidencia del Eurogrupo. Todo un trabajo previo para allanar el terreno a Miguel Arias Cañete, el ausente más presente en Dublín, que se perfila como el número uno del PP. Ninguno de los españoles presentes en Dublín pone en duda que Cañete será el elegido.

María Dolores de Cospedal insistió en que el anuncio no se hará en la capital irlandesa. Todo apunta a que será el lunes, tras el comité ejecutivo nacional, aunque hay fuentes que aseguran que podría ser la semana siguiente. El PPE aprobó su programa electoral, en el que se incluye una mención expresa a la unidad de los países miembros, es decir, en contra de las aventuras separatistas. Se da la circunstancia de que este texto recibió el apoyó de los dos representantes de Unió Democrática de Cataluña, partido que preside Josep Antoni Duran i Lleida. El programa, sin embargo, no incluye ninguna mención a temas de máxima actualidad en España como el aborto.