SATISFACCIÓN EN EL PP BOQUERÓN

Satisfacción. Esa es la sensación generalizada que define a la delegación malagueña -la más numerosa- que ayer regresó desde Sevilla, donde este fin de semana se ha celebrado el congreso extraordinario que ha encumbrado a Juanma Moreno Bonilla al liderazgo del PP de Andalucía. Un cónclave donde los populares malagueños han salido reforzados con el reconocimiento del peso político que la provincia representa en la región.

Por ello, en la mayoría de los casi 300 malagueños asistentes al cónclave se palpaba un ambiente de euforia contenida, de confianza y esperanza en la nueva etapa que el partido emprende a partir de esta semana y en el destacado papel que Málaga está llamado a jugar. Y así lo evidenciaron en las conversaciones de pasillos del sevillano Palacio de Congresos y en los corrillos durante el cóctel celebrado por la delegación provincial en el Museo del Carruaje, situado en el barrio hispalense de Los Remedios a orillas del Guadalquivir, en la noche del pasado sábado.

En ambos escenarios, los comentarios de los altos dirigentes, los cuadros intermedios y los militantes de base tenían un denominador común: «Se ha hecho justicia con Málaga». Y es que, como sostuvieron varias fuentes consultadas, «ya era hora» de que el PP de Andalucía reconociera el peso institucional, orgánico (en cuanto a militantes) y electoral que representan, desde hace años, los populares malagueños.

«Hacía falta aire fresco en el PP andaluz y Juanma le va a dar un nuevo y gran impulso al partido con un proyecto integrador», destacó un veterano dirigente. Cuantitativamente 33 malagueños ocupan puestos en los distintos órganos de dirección, gobierno y asesoramiento del partido en la región, pero, como remarcaron algunas fuentes consultadas, «lo importante es el peso cualitativo» ya que la opinión de los populares de la provincia va a ser «fundamental y determinante». Un hecho lo evidencia. En la previa al congreso, en el arranque y en el desarrollo del mismo, antes de conocerse la composición de la dirección, las decisiones y las consultas pasaban por muy pocas manos, entre ellas las de los malagueños Elías Bendodo y Margarita del Cid.

A juicio de los populares malagueños, en este nuevo tiempo hay que «sumar», no caer en «el provincialismo» y trabajar «duramente» para asentar el proyecto de Moreno Bonilla. Un líder con «grandes potencialidades», aunque, como reconocieron algunos malagueños, tiene «cosas que mejorar», fundamentalmente, en cuanto a sus discursos.

Los populares malagueños también son conscientes, como algunos de ellos se encargaron de recordar, que hay fuerzas políticas y mediáticas con el cuchillo entre los dientes a la espera del menor de los tropiezos para sacarlos a relucir. Un síntoma de los recelos con los que desde algunos sectores se ve el auge del PP malagueño se evidenció el pasado sábado por la tarde cuando se conoció que Elías Bendodo iba a ser el portavoz regional -y por ende hombre fuerte- del partido. En ese momento, hubo murmullos y runrún.