Las compañías aéreas se beneficiarían de la independencia de Escocia
LONDRES. Actualizado: GuardarEl consejero delegado de IAG, Willie Walsh, afirmó ayer que su compañía, que incluye a British Airways, Iberia y Vueling, saldría posiblemente beneficiada en caso de que Escocia decida su independencia, porque su Gobierno se propone reducir a la mitad y abolir más tarde la tasa a las compañías aéreas por cada pasajero que transportan, que Londres casi ha triplicado para la banda más baja desde 2007.
El jueves, una gran firma financiera, Standard Life, con sede en Edimburgo, informó a sus accionistas de que está registrando sociedades en Inglaterra como una medida de precaución ante incertidumbres como la moneda que usaría la Escocia independiente o su regulación del sistema financiero. Fue una noticia bien recibida por los partidarios de la unión.
Walsh presentó ayer un balance anual con beneficios y, al comentarlos en un programa de la BBC, le preguntaron si también su compañía había tomado precauciones. «Al contrario», dijo el consejero delegado de IAG, que demostró que conocía el contenido del Libro Blanco del Gobierno escocés, que se propone abolir gradualmente un impuesto que, también según Walsh, perjudica a su economía.
El turismo emplea a 200.000 personas en Escocia y el número de visitantes ha descendido tras el encarecimiento de los vuelos como consecuencia de la tasa, que para trayectos menores de 3.000 kilómetros, añade unos 15 euros a los billetes más baratos y cerca de 30 para los demás. El Gobierno escocés dice que ese aumento también repercute en el gasto de los turistas.
El jefe de Ryanair, Michael O'Leary, expresó también la misma opinión que su colega Walsh. Ambos son irlandeses. Los portavoces de la campaña Mejor Juntos afirmaron que la promesa de reducir las tasas de vuelos aéreos «no es el argumento más fuerte» en favor de la independencia.