Sociedad

¿Qué fue de los 61 'picassos' que perdió España?

La escritoria Pepita Dupont entrevé intereses políticos en la vuelta a Francia de los cuadros que la viuda del pintor donó al Gobierno de González

BARCELONA. Actualizado: Guardar
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El 15 de octubre de 1986, Jacqueline Roque, la segunda mujer de Pablo Picasso, se suicidó de un disparo en la cabeza. Millonaria, su última voluntad fue donar 61 obras de su marido, muerto 13 años antes, a España. Sin embargo, aquella sesentena de 'picassos', que se expusieron en 1986 en el Museo Español de Arte Contemporáneo (MEAC) de Madrid, tomaron el camino de vuelta enseguida. Nadie desde entonces ha sido capaz de explicar por qué no se quedaron en España. La escritora gala Pepita Dupont acaba de publicar en español 'La verdad sobre Jacqueline y Pablo Picasso' (Elba), donde trata de arrojar algo de luz sobre éste y otros episodios de una de las parejas más célebres del siglo XX.

Dupont, que lanza su obra en España, siete años después de hacerlo en Francia, afirma que vio con sus propios ojos el testamento de Jacqueline, con el que legaba los 61 cuadros a España, como también lo vio el artista chileno Gastón Orellana. Pero ese documento nunca se ha hecho público y los notarios de los herederos de la familia Picasso siempre han negado que existiera. La escritora y periodista francesa, en cambio, desconfía.

Amiga personal y confidente de Jacqueline, relató que la llamó poco antes de morir, para decirle que había elegido con el director del MEAC, Aurelio Torrente, las 61 obras que se quedarían en España, y que ya había hablado sobre el asunto con Catherine Hutin, heredera y su única hija; además del entonces presidente francés, François Mitterrand; con el abogado de Picasso, Roland Dumas, y con el abogado español José María Armero. Pero Jacqueline Picasso murió y España perdió para siempre el tesoro picassiano. A su juicio, el Gobierno no hizo todo lo posible para reivindicar esas obras. La escritora cree que Felipe González recibió presiones de Mitterrand para no «pelear» más por la cuestión.