La exdirectora de la Hacienda navarra insiste en sus acusaciones de «injerencias políticas»

La exdirectora gerente de la Hacienda Tributaria Idoia Nieves ha dicho desconocer que iba a ser relevada de su cargo antes de presentar su dimisión, por lo que se sorprendió al enterarse. Tras responder a las principales cuestiones objeto de la comisión de investigación a preguntas de los dos primeros portavoces, los de UPN y PSN, Nieves ha precisado algunas cuestiones en respuesta al portavoz parlamentario de Bildu, Maiorga Ramírez.

En sus respuestas, ha insistido en que ha habido "intromisiones e injerencias en competencia que no son propias", y ha reiterado que percibió que el cumplimiento del objetivo de déficit era la prioridad para la presidenta Yolanda Barcina y la consejera Lourdes Goicoeceha frente a otras cuestiones. Ha reiterado que se incumplieron los plazos de devolución del IVA y eso ocasionó un perjuicio a las empresas, que no sabe si Barcina conocía su cuantificación pero Goicoechea sí, según ha precisado.

Nieves ha citado que otra de las medidas que adoptó el Gobierno para cumplir el objetivo del déficit fue la supresión de la paga extra a los funcionarios, y ha comentado que el consejero de Fomento reconoció que la operación de Nasuvinsa también había ayudado a ese objetivo. Sobre si estas decisiones desvirtuaron el debate parlamentario de 2013, ha señalado que, en su opinión, no afectó al rigor, pero desde el momento en el que se fija el techo de gasto se desvirtúan las cifras.

Tras indicar que desconoce el motivo por el que el proyecto de presupuesto de 2014 se entregó fuera de plazo, ha precisado que no tuvo que ver con el cálculo de los ingresos. Ha reiterado que, durante una comida, la consejera le pidió el Plan de Inspección. Una comida que, según Ramírez, Goicoechea contabilizó como gastos.

Las acusaciones de Nieves

No es la primera vez que Nieves ofrece esta versión, puesto que ya denunció hace unos días los reiterados intentos de "intromisión" e "injerencias" por parte de Goicoechea que denunció el día que explicó en la Cámara las razones de su dimisión. La exresponsable de los tirbutos de Navarra ha venido justificando su dimisión en su desacuerdo con las decisiones tomadas por la consejera, en la ausencia de objetivos y en la "manifiesta desconfianza" percibida en Goicoechea, a quien atribuyó diversos intentos de "injerencias" en materias que no le correspondían.

Acompañó esas afirmaciones con el relato de diversos episodios, como los intentos de acceder a datos o informaciones tributarias, la pretensión de impedir una actuación que ya estaba prevista o el intento de cambiar el contenido de la actuación en relación con un contribuyente.

Llegó a comentar que la consejera le instó para cambiar la propuesta de revisión del impuesto de sociedades de otro contribuyente y mostró preocupación porque Goicoechea recibiera a algunos clientes "como si siguiera siendo su asesora fiscal".

Nieves manifestó además que la consejera le había pedido información sobre las retribuciones de los consejeros de Caja Navarra, por interés de la presidenta Barcina. Las acusaciones siempre han sido negadas por la consejera, quien de la misma manera que Barcina ha explicado que no va a dimitir y ha presentado en el juzgado una demanda de acto de conciliación en la que insta a Nieves a que pruebe las acusaciones o a que, en caso de no hacerlo, se retracte expresamente de las mismas.