Los obispos piden que el drama no sea «bandera de enfrentamiento»
MADRID.Actualizado:Los obispos consideran que la política de extranjería basada solo en el control de las fronteras «no está dando resultado». El secretario general de la Conferencia Episcopal, José María Gil Tamayo, expresó ayer su «pesar y dolor» por la muerte de 15 subsaharianos en la playa del Tarajal, aunque se abstuvo de condenar el uso de pelotas de goma para impedir la entrada de 'sin papeles' en territorio español.
Para el portavoz de la jerarquía eclesiástica, no se puede caer «en la globalización de la indiferencia», como denunció en su día el papa Francisco. El secretario general del episcopado subrayó que los inmigrantes que perecieron tratando de arribar a nado a las costas de Ceuta «intentaban llegar al paraíso europeo, huyendo de los países donde los derechos humanos son pisoteados o donde viven en la miseria más absoluta».
«Sin entrar en el debate político», urgió a los partidos para que no conviertan este asunto en «bandera de enfrentamiento. Es un drama humano, al que tenemos que dar respuesta», dijo.