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Joan Rosell y Joaquim Gay de Montella, juntos en un acto empresarial en Barcelona. :: INÉS BAUCELLS
ESPAÑA

Los empresarios ignoran a Mas y rechazan implicarse en el proceso soberanista

El presidente afirma que la independencia es «el futuro natural» de Cataluña y anuncia elecciones si Rajoy no permite la consulta

CRISTIAN REINO
BARCELONA.Actualizado:

Los problemas se le acumulan al presidente de la Generalitat. No solo tiene en contra al sector financiero catalán y a la Unión Europea, que le advierte casi todas las semanas de que su proyecto puede dejar a Cataluña fuera de Europa y del euro, sino que además empieza a ver que será muy complicado ganarse a la gran empresa catalana para su causa soberanista.

Artur Mas lanzó el viernes pasado un SOS al mundo empresarial catalán, al que pidió que dé un paso adelante, 'salga del armario' y se comprometa con el proceso independentista para «conducir todos juntos» y «cada uno desde su responsabilidad» la transición política hacia el Estado propio. Tanto la patronal española como la catalana respondieron ayer que de implicarse nada, que los empresarios «no están para hacer pactos políticos», según el presidente de la CEOE, Juan Rosell. El camino de los industriales y altos directivos es el «económico y social», remató Joaquim Gay de Montellà, máximo responsable de Fomento del Trabajo, la principal patronal catalana, que pertenece además a la CEOE.

Eso sí, tanto Rosell como Gay de Montellà reclamaron «diálogo» entre el Gobierno central y el autonómico para que haya «estabilidad» y no incertidumbre, y para que «todo el mundo se sienta cómodo». «A su manera (los empresarios) están buscando vías para afrontar el problema», señaló Rosell, que emplazó a las instituciones del Estado a «entender que en Cataluña hay un problema», que la situación es «compleja», pero que para resolverla es preciso «encontrar salidas» como hicieron en la Transición.

Calabazas empresariales

El presidente de la Generalitat reclamó la semana pasada a los que hasta hace bien poco eran sus aliados naturales, los herederos de la burguesía catalana, que den la cara, se mojen y se impliquen en el momento político que vive Cataluña. Pero de momento, no recibe más que calabazas. José Manuel Lara, Josep Lluís Bonet, una sesentena de directivos alemanes, el Círculo de Economía, el lobby Puente Aéreo, así como las dos principales entidades financieras de Cataluña, CaixaBank y Banco Sabadell, y las dos grandes patronales le han dado a entender que no puede seguir por la vía de la ruptura.

Mas, en cambio, no se da por aludido. En una entrevista publicada ayer en el diario italiano Corriere della Sera, habló más nítido que nunca y afirmó que «la independencia es el futuro natural de una vieja nación que ha mantenido durante siglos su lengua y su cultura». El jefe del Ejecutivo catalán, que hoy volverá a tener un nuevo encuentro con el mundo empresarial en el almuerzo-coloquio organizado por la Asociación para el Progreso de la Dirección y la compañía Deloitte, dejó clara cuál será su respuesta si Mariano Rajoy cierra todas las puertas para celebrar la consulta soberanista. «Tendremos elecciones», aseguró en el rotativo transalpino, que «serán el equivalente a un referéndum sobre la independencia».

Unas plebiscitarias previstas para el 9 de noviembre, el mismo día previsto para el referéndum de autodeterminación, que serán además la antesala de la declaración unilateral de independencia por parte del Parlamento de Cataluña, siempre y cuando que salga de las urnas una clara mayoría soberanista. «No podemos proclamar la independencia sin saber si existe o no una mayoría en el país», precisó.

Después de publicar un artículo en seis diarios de pequeña tirada de Malta, Chipre, Bulgaria, Estonia, Croacia y Bélgica, la Generalitat continúa con el proceso de internacionalización del proceso y de búsqueda de aliados en el exterior. Entre otros, el de la internacional de los liberales europeos, grupo al que pertenece Convergència y en el que están adscritos el comisario económico de la UE, Olli Rehn, o el secretario general de la OTAN, Anders Rasmussen, y que ha dado su apoyo al derecho a decidir catalán. Su presidente, Guy Verhofstadt, exprimer ministro belga, se reunió ayer con Mas en el Palau de la Generalitat.

El dirigente nacionalista dará asimismo esta semana un paso hacia el Estado catalán. Y es que, tiene previsto presentar este jueves el nacimiento de la Hacienda propia, la estructura fiscal de país que reclama para hacer la transición hacia la independencia.