Elena Valenciano llama a abrir en las europeas el camino de retorno a la Moncloa

El PSOE no oculta sus intenciones. Pondrá toda la carne en el asador para ganar las próximas elecciones europeas y para demostrar que ha puesto fin al ciclo de derrotas inaugurado en 2009 y que se encuentra en condiciones de vencer en los comicios autonómicos y locales de 2015, que le abrirían las puertas, meses después, para su retorno al palacio de la Moncloa.

La número dos del partido y futura cabeza de lista para el Parlamento de Estrasburgo, Elena Valenciano, reunió ayer en la sede madrileña de la calle Ferraz a los máximos responsables provinciales del partido y a algunos de los principales dirigentes autonómicos para pedirles que se tomen los comicios del 25 de mayo «como si fuesen unas generales».

Su mensaje es que tienen que movilizar toda la maquinaria del partido para contrarrestar la tradicional alta abstención de las europeas con un triple objetivo. En primer lugar, provocar un vuelco en Europa, tanto en el Parlamento como en la Comisión, y ganar la batalla ideológica a la derecha para que las políticas para la salida de la crisis dejen de basarse en la austeridad y apuesten por el crecimiento y la lucha contra el paro, con «un plan de rescate del empleo juvenil» como prioridad continental absoluta.

El segundo gran objetivo es que los comicios de mayo se conviertan en un voto de castigo para Mariano Rajoy y la «gestión desastrosa» de su Gobierno. La campaña de las europeas, arengó Valenciano, en lo que se convirtió en su primer mitin de precampaña, «no puede acabar dándole un cheque a Rajoy para que de manera total y absolutista acabe de destrozar la esperanza de este país. Lo último que puede pasar es que el PP vea refrendada su actitud y su política», insistió.

«Cambio de rumbo»

La tercera finalidad del hambre de victoria que reclamó ayer Valenciano es demostrar que el «cambio de rumbo» que reclama para Europa y España se evidencie también en su partido. Que los militantes y los ciudadanos interioricen que el PSOE ha terminado su travesía del desierto, que el partido «está armado y con un proyecto ideológico». Que «recuperen la ilusión» y se convenzan de que se puede «empezar a ganar», porque «está ahí, al alcance de la mano».

La número dos socialista también mandó un recado para IU. Dijo que hay que derrotar «a la derecha, a la extrema derecha y a esos partidos que están a nuestra izquierda y claman y claman, pero poco hacen, poco gobiernan y poco proponen».