Las sombras negras del profesor Díez
«Muchas veces me quedé a solas con él y no vi nada extraño», asegura una alumna; «me intentó tocar pero no se lo dije a mis padres», comenta otra Estupor en un colegio de Madrid tras detener y dejar luego en libertad al director y al jefe de estudios por tapar los abusos sexuales de un maestro
MADRID.Actualizado:«Como antiguo alumno me sorprende la noticia y me llena de tristeza. En favor del honor y de la intachable actitud de Andrés Díez y del Colegio Valdeluz me da la impresión que se trata de unas falsas acusaciones que intentan molestar al centro y al propio Andrés». «Jamás me esperaría nada similar de alguien como Andrés, que me dio filosofía y música en su academia. Nunca tuvo una mirada fuera de lugar; es más, reprendía a quien no se comportaba como es debido. Organizaba siempre las fiestas y eventos fuera de lo académico, pero jamás se sobrepasó y sabía cómo animar a la juventud». «Era uno de mis profesores favoritos y nunca sospeché nada. Muchas veces me quedaba a solas con él, ya que era mi tutor, pero no noté nada extraño. Estoy en 'shock', para mí era un profesor ejemplar». «Me intentó tocar y yo me fui. Estábamos en clase de piano y yo pasé de él. Me daba cosa contárselo a mis padres». «Soy del año 76, estuve en ese colegio de adoctrinamiento 13 años, de Preescolar a COU, y a pesar de ellos fui a la universidad. Soy uno más que sobrevivieron a este centro. Vi bofetadas, exhibicionismo y palmaditas en el culo».
Un telón negro de sorpresa, estupor, rencor y también venganza cubrió ayer las paredes del Colegio Valdeluz Agustinos, situado en el Barrio del Pilar de Madrid. Alumnos, exalumnos, profesores y padres no salían de su asombro. Y algunos testimonio de puertas hacia fuera del centro concertado y los plasmados en las redes sociales eran realmente estremecedores. El martes por la tarde se conocía la detención del profesor de música y filosofía desde hace 20 años, Andrés Díez Díez. La Policía Nacional le acusaba de al menos 12 delitos de abusos sexuales, uno de violación y otro de exhibicionismo cometidos desde 2006 a alumnas de entre 12 y 17 años del colegio y de la academia Melodía Siglo XXI.
Mientras los 90 profesores y 1.700 alumnos trataban de digerir las tremendas revelaciones policiales tras una exhaustiva investigación, ayer por la tarde el círculo de sospechosos se amplió al director del Colegio Valdeluz, el padre Eustaquio Iglesias, y al jefe de estudios, Juan José de Cossío.
Una noticia que caía como una bomba entre la familia de padres agustinos porque ya no eran las depravadas actividades sexuales de un docente, siempre supuestamente, sino que los dos pesos pesados del centro educativo las conocían, no las denunciaron y las taparon con silencio duranta años.
La Policía les detuvo por omisión del deber de impedir el delito, según confirmaron fuentes de las fuerzas de seguridad. Es decir, de encubrir los supuestos abusos sexuales continuos y reiterados del profesor Díez, de 51 años, casado con una profesora de la misma academia de música y con la que tenía una hija.
«Trayectoria intachable»
La detención del padre Eustaquio se produjo después de que éste emitiera un comunicado el miércoles en el que expresaba la consternación de la institución por los supuestos abusos, explicaba que estaba colaborando con la justicia y aseveraba que nunca tuvo sospechas sobre el profesor, que tiene una «trayectoria tanto personal y familiar como profesional intachable en más de veinte años».
Sin embargo, a primera hora de la tarde de ayer la Policía acudió al colegio a detenerle, después de que el jefe de estudios fuera arrestado también tras prestar declaración en dependencias policiales de forma voluntaria y reconocer que sabía que el profesor podía haber cometido abusos, pero no lo denunció. Un ilícito reglado en el artículo 450 del Código Penal, que establece multas e incluso penas de prisión de entre seis meses y dos años de prisión.
Tras prestar declaración, tanto el director como el jefe de estudios fueron puestos en libertad con cargos. Eustaquio Iglesias convocó de inmediato al claustro de profesores para tratar de transmitir tranquilidad en medio de un ambiente de duda y pesar.
La Policía informó de que no se descartaba que el profesor arrestado hubiera podido agredir sexualmente a más de 12 menores del colegio. Porque en casos así, cuando se destapa la caja de pandora, suelen incrementarse las denuncias de las víctimas como la alumna que ayer reconocía a La Sexta que el profesor de música le intentó tocar alguna vez, pero que «le dio cosa» contárselo a sus padres.
El detenido pasará hoy a disposición judicial, para quien el juez dictará posiblemente prisión condicional.