Moreno aleja el riesgo de ruptura en PP andaluz
Cospedal guarda un día más silencio tras la decisión de Rajoy de designar al número dos de la ministra Ana Mato como único aspirante
SEVILLA. Actualizado: GuardarEl PP andaluz cerró filas ayer en torno a su flamante candidato a presidir la formación y optar a la Presidencia de la Junta de Andalucía, Juan Manuel Moreno Bonilla, y trató de minimizar la batalla interna abierta en los últimos meses por el proceso de sucesión de Juan Ignacio Zoido, alejando cualquier riesgo de ruptura. Poco después de que el considerado aspirante mejor posicionado, el secretario general regional José Luis Sanz, tirase la toalla y renunciara a competir, Moreno Bonilla escenificaba la unión al presentar su candidatura arropado por todos los presidentes provinciales.
María Dolores de Cospedal, que participó en un acto público en Ciudad Real, guardó un día más silencio tras la decisión de Mariano Rajoy de optar por el secretario de estado de Servicios Sociales. Además, en contra de lo que anunció la propia secretaria general del PP, se ha confirmado que sólo habrá un candidato único en el congreso extraordinario que los populares andaluces celebrarán entre el 1 y 2 de marzo.
Tras unas primeras palabras de agradecimiento a Mariano Rajoy, al que dijo considerar su referente, el todavía secretario de Estado se presentó como un candidato «de consenso» y dejaba claro que «no ha habido vencedores ni vencidos» en el PP de Andalucía ni en el PP nacional.
En el acto, sin embargo, faltaban el propio Sanz y el presidente regional Juan Ignacio Zoido, principal valedor de éste y que ayer mismo aseguraba que nunca había hablado con el presidente del PP de un solo candidato a sucederle y, por tanto, «no se sentía desautorizado».
Una declaración que contrasta con sus palabras de hace unas semanas, cuando en un acto del PP se preguntó «¿a quién podríamos nosotros poner que sea más serio y más responsable? Difícilmente podríamos encontrar a una persona que tuviera más valores y más facultades en esa línea que José Luis Sanz».
No obstante, Moreno trató de quitar hierro al asunto y justificó estas ausencias señalando que «no querían restarle protagonismo», asegurando además que contará con Sanz en su ejecutiva. «Aquí cabemos todos», espetó para reiterar a continuación su principal mensaje: «Unidad, unidad y unidad».
Aunque hace escasos tres meses descartaba presentarse para presidir el PP-A, aseguró que se trata de «lo más importante» que le ha pasado en su vida política, negando haber sido «un tapado». Así, consideró que el momento para optar a presidir el PP andaluz «era ahora», por lo que dio el paso «desde la más profunda humildad» y la convicción de «la necesidad de un cambio real» en Andalucía.
La demostración de consenso en torno a su liderazgo también ha venido, dijo, por los 9.000 avales recogidos en 24 horas. El secretario de Estado, dimitirá posiblemente antes del congreso extraordinario de marzo, recordó que representan diez veces el mínimo estipulado por los estatutos internos.
Aire fresco
Su intervención ante la prensa ha sorprendido por su discurso fresco y renovado, en el que admitió que será un problema no tener escaño en el Parlamento andaluz para enfrentarse cara a cara con la presidenta de la Junta y candidata socialista Susana Díaz.
No obstante, subrayó que contará con «otros instrumentos, como la calle», avanzando que, como apuntaban el día anterior algunos dirigentes, repetirá la estrategia de Javier Arenas, al que definió como «líder indiscutible dentro de la formación», de recorrer la comunidad pueblo a pueblo. Dejó claro que «no tiene ningún miedo» a enfrentarse políticamente a Díaz.
No obstante, mostró su convencimiento de que no tendrá que esperar mucho tiempo para sentarse en la cámara andaluza dado el interés de la presidenta por la política nacional hace presagiar una legislatura corta, según apuntó.