Andalucía ordena una auditoria sobre los fondos de formación

La Junta de Andalucía anunció ayer la puesta en marcha de una auditoría para aclarar la justificación de las subvenciones otorgadas en 2009 y 2010 a la formación profesional para el empleo. El anuncio se produce tras conocerse un informe de la Cámara de Cuentas autonómica que alertaba de que hasta el 89% de estas ayudas, por un importe de unos 49 millones, se concedieron sin control.

El consejero andaluz de Economía, José Sánchez Maldonado, explicó que con la auditoria se cumplen las recomendaciones del órgano fiscalizado para «tener más información y capacidad de análisis» sobre la justificación pendiente por parte de la extinta Fundación Andaluza para la Formación y el Empleo, una institución pública ya muy cuestionada por sus contratos sin concurso público.

El informe de la Cámara de Cuentas sobre las ayudas dadas por el Servicio Andaluz de Empleo señala que la mencionada fundación recibió ayudas por encima del importe máximo, unos 49 millones en subvenciones entre 2009 y 2010, de las que además «no consta justificación alguna», y alerta de que podrían derivarse responsabilidades administrativas y contables.

En ese periodo, se entregaron 746 millones en ayudas a la formación profesional para el empleo. La Cámara de Cuentas ha analizado de forma aleatoria apenas el 37%, un total de 279,5 millones, y los resultados no pueden ser más demoledores. Además de concederse sin concurrencia pública, no se controlaba si los cursos se hacían, algunos de ellos no se han iniciado o están pendientes de finalizar, matiza el texto, ni la incidencia de éstos en la creación de empleo.

El informe también cuestiona las subvenciones recibidas en 2009 por UGT y Comisiones Obreras de Andalucía para infraestructuras de formación. Se trata de 1,3 millones y 2,6 millones, que se otorgaron a través de una orden administrativa «que no prevé este tipo de objeto como subvencionable».