Audiencia de Sevilla

En libertad cinco acusados del tiroteo donde murió una niña

La pequeña, de siete años, fue la víctima de un tiroteo entre dos clanes en la barriada de las Tres Mil Viviendas

SEVILLA Actualizado: Guardar
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La Audiencia de Sevilla ha dejado en libertad a cinco de los nueve encarcelados por el tiroteo en el que el 20 de agosto de 2013 murió una niña de 7 años, aunque siguen en prisión los dos autores materiales de los disparos y la matriarca del clan.

El abogado de los imputados, Manuel Castaño, ha informado hoy de que la Sección Tercera de la Audiencia dictó ayer jueves el auto de libertad sin fianza y sus clientes salieron anoche de las prisiones donde permanecían desde su detención. Los liberados son cuatro hermanos y el yerno de la matriarca del clan, María del Carmen B.H., conocida como La Perla, que continúa en prisión así como otro familiar, su esposo y su hijo, estos dos últimos presuntos autores materiales del tiroteo.

El tiroteo se produjo cuando varios miembros del clan de Los Perla se dirigieron al domicilio de Los Mariano en la barriada de las Tres Mil Viviendas de Sevilla para pedir explicaciones por un secuestro ocurrido en mayo de 2013.

La Fiscalía de Sevilla se había opuesto a la libertad de todos los acusados pues los consideraba cómplices del tiroteo que alcanzó a la familia de la pequeña Encarnación S.S., de siete años, que murió en el acto mientras que sus padres resultaron heridos.

El abogado defensor ha dicho que no descarta pedir más adelante la puesta en libertad de las personas que quedan encarceladas, a la vista de los argumentos de la Audiencia. Según Castaño, no se puede admitir que todos los miembros de la familia permaneciesen encarcelados pese a que solo dos fueron los presuntos autores materiales del tiroteo.

Tras el suceso, los miembros del clan de Los Perla se refugiaron en una finca de su propiedad en Hinojos (Huelva) pero al sospechar que habían sido localizados huyeron a Mijas (Málaga), donde fueron detenidos el 23 de agosto. De los nueve encarcelados, solo Antonio G., alias 'El Coleta', y su hijo reconocieron haber disparado porque fueron "recibidos a tiros" cuando acudieron al domicilio de Los Mariano para pedir explicaciones por el secuestro.