Merkel se ayuda con las muletas en el Parlamento alemán. :: JOHN MACDOUGALL / AFP
MUNDO

Merkel se siente cómoda en la izquierda

La canciller alemana defiende ante el Bundestag la economía social como «brújula» de su mandato

BERLÍN . Actualizado: Guardar
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La economía social de mercado como «brújula», el cambio energético como objetivo e internet para todos como tierra virgen por conquistar. La canciller alemana, Angela Merkel, dedicó su primera declaración de Gobierno ante el Bundestag -el parlamento germano- desde la formación de la gran coalición de conservadores y socialdemócratas hace algo más de un mes a presentar los objetivos de su Ejecutivo. Pero también tuvo palabras de ánimo para los manifestantes de Kiev que exigen el acercamiento de Ucrania a Europa, «ya que persiguen los mismos valores que nos guían en la UE», y críticas para EE UU por el escándalo de espionaje de su Agencia Nacional de Seguridad (NSA).

Las escuchas sistemáticas de gobiernos amigos por parte de la NSA suponen una actuación en la que «el fin justifica los medios y eso daña la confianza y alimenta la desconfianza. Al final no hay más, sino menos seguridad», advirtió la canciller, quien reconoció que el acuerdo de no espionaje entre Washington y Berlín está muy lejos de convertirse en realidad ante la diferencia de planteamientos de ambos gobiernos y que «no se resolverá con una visita mía» a la Casa Blanca. Pese a todo, Merkel subrayó que «Alemania no puede imaginarse un aliado mejor que Estados Unidos» y rechazó congelar las negociaciones para un acuerdo de libre comercio con la UE: «una postura obstinada nunca conduce al éxito».

Primera canciller en la historia de Alemania que ofrece ante el plenario del Bundestag una declaración de Gobierno sentada, obligada por su lesión de cadera tras un accidente navideño de esquí, Merkel explicó que su gabinete desarrolla una «agenda digital» que tiene como uno de sus objetivos prioritarios que toda la población disfrute de internet a alta velocidad. Sin embargo, advirtió de que «no existe un marco legal internacional vinculante para internet. Lo que significa que abordamos tierra virgen», dijo tras subrayar su deseo de que «internet siga siendo tierra prometida. Y por eso, queremos protegerla».

La jefa del Gobierno germano subrayó también como uno de los objetivos prioritarios de la nueva legislatura el cambio energético, con el abandono de la energía nuclear y la apuesta por las renovables. Reconoció que el mundo contempla con «una mezcla de curiosidad e incomprensión» esa apuesta de Alemania, pero «si conseguimos llevarla a cabo se convertirá en un éxito exportador. Si un país puede lograrlo, ese es Alemania». Angela Merkel afirmó que «si hay una tarea política que no se centra en los intereses particulares, sino en las personas, esa es el cambio energético» e hizo un llamamiento a la nación, los Estados federados, los municipios, asociaciones e industria para que dejen al margen sus propios intereses y piensen en el bien común.

Salario mínimo

Asimismo alabó las premisas del acuerdo de coalición de su Unión conservadora con los socialdemócratas. «Apostamos por finanzas sólidas e inversiones en el futuro del país», comentó la canciller, quien dijo que «la economía social de mercado es nuestra brújula, porque sus baremos son válidos eternamente. Está centrada en las personas». Además elogió la primera 'gran coalición' a sus órdenes, entre 2005 y 2009, por sentar las bases para que Alemania capeara con éxito la crisis financiera internacional: «nuestra aportación además ha sido fundamental para que Europa supere la crisis de la deuda».

En su intervención aseguró que el compromiso alcanzado por la 'gran coalición' para la introducción del salario mínimo a partir de 2015 no dañará al mercado laboral y comentó que Alemania depende de la inmigración para garantizar la continuidad de su potencial industrial y el funcionamiento de su sistema social.

Merkel exigió igualmente a la hora de regular los mercados financieros «progresos que merezcan ese nombre» y que en el futuro «quien asuma un riesgo, cargue también con las pérdidas. Y no mas los contribuyentes». Añadió que la crisis de la zona del euro se encuentra bajo control, pero advirtió de que aun no ha sido superada. La canciller insistió además en que la unión monetaria debe convertirse en una unión económica, para lo que habrá que reformar inevitablemente los tratados de la UE.