Es noticia:
ABCABC de SevillaLa Voz de CádizCádiz
Un coche bomba causa al menos quince muertos en la ciudad siria de Idlib, muy próxima a la frontera con Turquía. :: REUTERS
MUNDO

La ONU retira la invitación a Irán para ir a la conferencia de paz

El secretario general renuncia a la presencia del gran aliado de Siria tras el anuncio de boicot de la oposición y las presiones de Washington

MIKEL AYESTARAN
Actualizado:

La cuenta atrás hacia la conferencia de paz de Ginebra II, prevista para mañana y el viernes, se ha convertido en una especie de carrera de obstáculos, y el último de ellos se llama Irán, gran aliado regional de Bashar el-Asad. El mismo día en que entró en vigor el plan de acción por el que durante seis meses la república islámica limitará sus actividades nucleares a cambio del levantamiento parcial de las sanciones internacionales, el secretario general de Naciones Unidas, Ban Ki-moon, sorprendió al invitar formalmente a Teherán a la cumbre sobre Siria, un movimiento que puso al borde del precipicio la celebración de la esperada cumbre después de casi tres años de guerra. Tanto que unas horas después anunció que retiraba la invitación, tras conocer el ultimátum lanzado por el Consejo Nacional Sirio (CNS), principal órgano de la oposición para que eligiera entre ellos o los iraníes.

Ban había justificado esta maniobra en la convicción de que los iraníes «se comprometen a desempeñar un papel constructivo» en el diálogo, pero su decisión causó profundo malestar en CNS y desagradó a sus aliados, entre ellos Estados Unidos y Arabia Saudí, que también exigieron la retirada inmediata de la invitación. La negativa a la presencia de Irán se basa en que la república islámica no es firmante del acuerdo alcanzado en Ginebra hace 18 meses, que será la base para la próxima negociación y establece la formación de un gobierno de transición en Siria como uno de los primeros puntos de la hoja de ruta.

La negociación nuclear, primero, la posterior invitación para esta conferencia de paz sobre Siria y su ulterior retirada confirman que el cambio de rumbo en la política exterior de un país que desde 2001, año de la conferencia en Bonn sobre Afganistán, estaba vetado en foros internacionales de relevancia, todavía levanta recelos. El nuevo Irán de Hasán Rohani, clérigo que llegó a la presidencia en verano en sustitución de Mahmoud Ahmadineyad, mostró su intención de asistir «sin condiciones previas» a Ginebra, una respuesta que dejó «decepcionado» al secretario general de la ONU.

Pese a que los dos enviados de la ONU a Siria desde el estallido de la crisis en marzo de 2011, Kofi Annan y Lajdar Brahimi, han apostado siempre por contar con Teherán, las fuertes presiones de Occidente y la negativa rotunda de la oposición política han acabado por dejarle fuera de esta primera ronda negociadora, que trata de buscar salida a un conflicto que ya ha provocado más de 130.000 muertos.

La cita sobre Siria se desarrollará en doble sesión entre Montreux y Ginebra. En la primera de estas ciudades se reúnen hoy los titulares de Exteriores de EE UU, John Kerry, y Rusia, Sergei Lavrov, con el mediador Brahimi. Las autoridades suizas y los representantes de la ONU continúan con todos los preparativos para la reunión diplomática. «El programa se mantiene en todos los aspectos», confirmó la portavoz de Naciones Unidas en Ginebra, Corinne Momel-Vanian. «La situación es muy volátil, pero seguimos trabajando porque no hemos recibido instrucción alguna en el sentido contrario», apuntó un representante del Ministerio de Exteriores helvético.

Acuerdo histórico

También en Ginebra, el pasado 24 de noviembre, la república islámica alcanzó un acuerdo histórico con el 5+1, grupo formado por los cinco miembros permanentes del Consejo de Seguridad de la ONU (Estados Unidos, Francia, Reino Unido, Rusia y China) junto a Alemania, que ayer entró en vigor.

A primera hora de la mañana el director general para la Organización de la Energía Atómica Iraní, Mohamad Amiri, declaró a la agencia Irna que «Irán ha suspendido la producción de uranio enriquecido al 20% en las instalaciones de Natanz y Fordo». El alto cargo iraní agregó que «el proceso de disolución y de transformación de la reserva de 196 kilos de uranio al 20% en óxido también ha comenzado», dos de las condiciones principales firmadas por el equipo negociador iraní para ganarse la confianza de Occidente.

El Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA) confirmó el anuncio realizado por la república islámica, que pone en marcha el plazo de seis meses en los que el OIEA tiene la misión de desvelar la naturaleza de un programa que los iraníes insisten en que persigue objetivos civiles, pero Occidente sospecha que busca la fabricación de una bomba atómica.

La llegada de Hasán Rohani ha dado un giro radical a la imagen externa del país. Pese a las advertencias de Israel, que califica al presidente iraní de «lobo con piel de cordero», el clérigo prometió mejorar la situación económica del país y para ello la prioridad ha sido intentar acabar con unas sanciones que afectaban al sistema financiero y a la comercialización del petróleo, principal fuente de recursos del país.