ETA se reafirma en su decisión «estratégica» de abandonar la lucha armada
PP, PSOE y PNV advierten que el nuevo comunicado de la banda no aporta nada nuevo e insisten en que el único paso que debe dar es el de la disolución
MADRID. Actualizado: GuardarLa militancia de ETA apoya de forma aplastante el abandono de la lucha armada. Así se afirma en un comunicado interno de la organización terrorista fechado el pasado diciembre y hecho público ayer por el diario Gara. En este documento la banda afirma que el abandono de la violencia es una decisión «estratégica» para avanzar en el camino de la independencia.
«El 80% de los militantes de ETA están de acuerdo con las decisiones tomadas estos años y sólo el 4,2% vota en contra de la ponencia presentada en el marco del proceso de reflexión interna llevado a cabo durante meses y recientemente concluido», reza el comunicado.
ETA afirma también que asume como una «prioridad» superar el conflicto aunque señala que para lograrlo se deben «dar pasos prácticos en la vía independentista».
En la senda de pacificación la organización terrorista denuncia «la actitud obstruccionista de las sucursales que las fuerzas estatales tienen en Euskal Herria», las cuales, se añade, «buscan impedir el proceso de transición intentando sujetar a su lado a la burguesía vasca y al autonomismo». En esta línea critica el posicionamiento del PNV, al que acusa de seguir la «estela» de un estado español que «sufre una crisis profunda e integral». En cualquier caso, la banda tiende la mano al partido del lehendakari Iñigo Urkullu ya que estima que «resulta fundamental que las fuerzas independentistas desarrollen una estrategia eficaz de modo que la decantación estratégica pueda ser, finalmente, favorable a Euskal Herria». El comunicado destaca la importancia de crear un frente soberanista para superar el «bloqueo e involución de los estados y determinados agentes políticos nos puede llevar al trance de desactivación del proceso». «Hay que huir de esa trampa y poner todas las fuerzas a favor del proceso como pueblo, que tenga como objetivo conformar la mayoría vasca», concluye el mensaje.
Según expone Gara, este comunicado habría sido incautado por la Guardia Civil durante la última operación contra el entramado etarra en la que se detuvo a ocho supuestos interlocutores entre la banda y el colectivo de presos.
Disolución definitiva
El comunicado de ETA, el décimo que se hace público desde el anuncio del cese de la lucha armada, fue acogido con indiferencia por la mayoría del arco parlamentario. Con la única excepción de EH Bildu, todos los partidos exigieron a la banda su disolución definitiva y la entrega de las armas.
Desde el Partido Popular su portavoz en el País Vasco, Borja Semper, resumió el documento como «un bla, bla, bla, plagado de la retórica de siempre». Según Semper, el escrito refleja la realidad, y esta es que ETA no ha dado ningún paso en la consecución de la paz sino que simplemente «ha sido derrotada y forzada a dejar de asesinar». «Al PP no le interesa nada de lo que pueda decir o escribir ETA hasta su disolución», zanjó el portavoz popular.
En la misma línea se manifestó el partido socialista. El secretario de Organización del PSE, Rodolfo Ares, restó valor a este nuevo comunicado al asegurar que «solo faltaba que no respaldaran la decisión que tomaron en octubre de 2011 de poner fin a la lucha armada».
El lehendakari Iñigo Urkullu se sumó a las críticas hacia ETA al señalar que sus palabras no significan ningún paso adelante. A través de las redes sociales, el jefe del Ejecutivo autonómico manifestó que lo que la sociedad vasca espera de la banda es su desarme y que reconozca el daño causado, y no «solo el sufrimiento como consecuencia del conflicto». Para el lehendakari estos son avances que no se pueden demorar por más tiempo.
Las únicas buenas palabras hacia el escrito de la organización terrorista llegaron desde la izquierda abertzale. En opinión de EH Bildu el documento publicado por Gara refleja que el proceso de paz no tiene vuelta atrás.
Por parte del colectivo de víctimas la presidenta de la AVT, Ángeles Pedraza, opinó que en el documento ETA «no reconoce en ningún sitio lo que han hecho, se arrepienten y piden perdón ni hablan de colaborar con la justicia.