Fugaces 10.500 puntos

Está claro que la presentación de resultados es la que está marcando la evolución de las Bolsas. El lunes los índices mostraron su temor a la decepción. Y el martes y el miércoles lo positivo de las cuentas de algunos bancos americanos, como JP Morgan, Bank of America y Wells Fargo, hicieron posibles las subidas. Lo malo es que ayer llegó Citi y su decepción y ello inyectó cierto pesimismo y preocupación en los índices de renta variable. No gustaron tampoco las cuentas que presentó Goldman Sachs. Pese a publicar un beneficio por acción de 4,60 dólares, frente a los 4,18 dólares previstos por los analistas, respondió a la baja en Bolsa porque su negocio de trading ha caído hasta su nivel más bajo en más de una década. En primer lugar en Wall Street, porque el día anterior habían cerrado la jornada en máximos históricos. Y, a continuación, en Europa. En el caso del Ibex-35 eso implicó que el indicador, que durante todo el día estuvo rondando los 10.500 puntos que había recuperado la jornada anterior, perdiera ese nivel, para dar un último cambio en los 10.455,50 puntos, tras haber retrocedido un 0,66%%. Sólo hubo un indicador más castigado que el selectivo español: fue el Ftse Mib de Milán, que perdió un 0,85%. El mejor fue el Ftse 100 británico, que terminó el día prácticamente en tablas. Mientras, el Cac 40 francés perdió un 0,30% y el Dax alemán, un 0,17%.

Los resultados de Citi pesaron mucho más en las Bolsas que los buenos datos económicos que se hicieron públicos en Estados Unidos. El índice de actividad de la Fed de Filadelfia subió en enero desde los 6,4 hasta los 9,4 puntos, cuando los analistas habían pronosticado que se colocara en los 8,6 puntos. El que flaqueó un poco fue el índice de confianza de los promotores estadounidenses, dado que bajó desde los 57 hasta los 56 puntos. Aunque, sin duda, la referencia más importante fue el paro semanal: el número de solicitudes de subsidios de paro bajó de las 328.000 hasta las 326.000 contra pronóstico, además el nivel más bajo en más de un mes. La buena marcha del empleo en Estados Unidos, pese al mal dato del mes de diciembre, es lo que hace posible que los temores deflacionistas estén mucho más lejos que en la zona euro: allí la inflación se colocó en el 1,5% en diciembre, se trata del nivel más alto de los seis últimos meses. Por la mañana se publicó el dato de la zona euro, que subió apenas un 0,8% el año pasado.

Por completar la foto, conocimos datos también de Japón. En concreto, los pedidos de maquinaria: crecieron un 16,6% interanual en noviembre, por encima del 11,7% estimado por los analistas.

Bajan las rentabilidades de todos los bonos

En el mercado de deuda, la rentabilidad de los bonos españoles a diez años bajó desde el 3,77% hasta el 3,74%. La del bono italiano a diez años, desde el 3,87% hasta el 3,85%. También bajaron con fuerza los retornos de los bonos “core”. En concreto, la rentabilidad del bono estadounidense a diez años cayó desde el 2,88% hasta el 2,85%. Y la del bono alemán a ese mismo plazo bajó desde el 1,82% hasta el 1,78%. Con este comportamiento de los bonos periféricos y “core”, al final la prima de riesgo de la deuda española terminó la sesión en el entorno de los 195 puntos básicos, los mismos niveles de la jornada anterior. Y la de Italia subió ligeramente hasta los 207 puntos básicos.

El Tesoro español ayer emitió deuda a tres, trece y quince años. Captó un total de 5.915 millones de euros, por encima del objetivo máximo, establecido en los 5.500 millones, debido a la fuerte demanda. En el plazo a tres años, la caída de la rentabilidad fue muy importante: desde el 2,181% hasta el 1,595%, mínimos históricos.

En el selectivo español, FCC encabezó los ascensos, con una subida superior al 6%, seguido de ArcelorMittal, con un avance del 2%. Lejos, todos los demás valores que terminaron en positivo. Porque el tercer más rentable fue Indra y no llegó a subir ni un punto porcentual: terminó el día con una rentabilidad del 0,83%. Enagás, Abertis y CaixaBank avanzaron algo más de un 0,7%. BME, Técnicas Reunidas y Grifols, alrededor de un 0,5%. Entre los grandes valores, avances para Iberdrola, que se apuntó un 0,24%, y para Repsol, que ganó un 0,16%.

En negativo, se impuso la recogida de beneficios en BBVA, que se dejó un 2,52%. A continuación, Bankia, que retrocedió un 2,10%. Popular, Acciona, Santander, Gamesa, Bankinter e IAG cedieron más de un punto porcentual. Y más bancos en rojo: el Sabadell, que retrocedió un 0,88%. Entre los grandes valores, además de los bancos, Telefónica, que cedió un 0,20%.

Brillan las energías verdes

En el Índice General de la Bolsa de Madrid, Solaria lideró los ascensos con una revalorización del 15%. A continuación, Fersa, que subió un 10,87%, mientras que Abengoa avanzó un 7,05%. Parece que a las compañías “verdes” les ha gustado que la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia haya dado su visto bueno al fin del modelo actual de subvenciones. A cambio, se creará un nuevo sistema que garantiza una rentabilidad mínima.

En negativo, Urbas fue el peor, con un recorte del 3,45%, seguido de CAF y Realia, que perdieron más de un 2%. Éstos fueron los tres únicos valores que terminaron la sesión con caídas superiores a las de BBVA y Bankia.

En el mercado de materias primas, estabilidad en el crudo. El barril de Brent, de referencia en Europa, bajó un 0,08%, hasta los 107,04 dólares. El de West Texas, de referencia en Estados Unidos, sí cayó un poco más: retrocedió un 0,33%, hasta perder los 94 dólares. El oro, por su parte, subió un 0,26%, hasta los 1.241,3 dólares.

En el mercado de divisas, el comportamiento del euro ayer fue bastante volátil, puesto que llegó a superar con fuerza el nivel de 1,36 unidades, para tocar 1,364 dólares, pero al cierre apenas lograba mantener el nivel de 1,36 dólares.